El ingeniero Julio Balloffet falleció el 12 de septiembre de 1897 y en el 115º aniversario de su deceso la Comuna de San Rafael , la UTN y el Centro de Ingenieros recordó su figura con una charla debate encabezada por uno de sus bisnietos, Armanado Layera Balloffet, la historiadora María Elena Izuel y el subsecretario de obras públicas Enrique Ferraro.
La charla comenzó con las palabras del arquitecto Ferraro quien destacó la tarea del ingeniero cuyo verdadero título universitario fue el de agrimensor. En esas palabaras, Ferraro señaló "la importancia que tuvo Balloffet en la reconstrucción de Mendoza tras el terremoto de 1861 y en la diagramación de la ciudad sureña".
En ese sentido, el bisnieto que estuvo acompañado por su hermana Marta Ema, sus hijos y su eposa, recordó la figura del francés que vino a la Argentina en 1859 junto a su amigo Augusto Bravard que falleció durante el sismo en Mendoza. La muerte de Augusto produjo un quiebre en la vida de Balloffet que viajó desde Buenos Aires a Mendoza para buscar sus restos y nunca volvió.
Layera Balloffet recordó que "en Mendoza conoció a Aurorra Suarez hija de un terrateniente que poseía tierras en San Rafael hasta donde viajó, fundó el fuerte a orillas del Río Diamante y junto a Rodolfo Iselín construyó las bases del San Rafael actual"..
A posteriori, la historiadora Maria Elena Izuel destacó la hombía de bien del inmigrante y mencionó que "en San Rafael no se lo reconoce como en la ciudad de Mendoza" y narró la historia cuando "Balloffet presentó el plano para la reconstrucción de la ciudad destruída por el terremoto de 1861 y los legisladores lo rechazaron porque no entendían la diagramación que realizó para que los habitantes pudieran escapar en el futuro a un nuevo sismo". Sin embargo el entonces gobernador Molina, agregó Izuel, "escuchó la propuesta de Balloffet y le dio su consentimiento".
En definitiva con la presencia de varios funcionarios universitarios y distinguidos ingenieros del medio, Julio Balloffet volvió a tener su merecido homenaje.
Su obra
Por encargo del Gobierno provincial, el agrimensor Balloffet desarrolló el proyecto de la nueva ciudad, un poco más al sur de la destruida, en el asiento denominado Hacienda de San Nicolás. En poco tiempo, el plano de la nueva urbe quedó concluido, dándole a la misma una novedosa proyección en donde las calles principales tendrían mayor anchura; éstas serían las actuales San Martín, Las Heras, Colón y Belgrano, con el agregado de cinco amplias plazas.
Dicha planificación fue criticada por los entendidos de la época. Después de varias discusiones, el gobernador Luis Molina aprobó los planos, con la rectificación de que las vías de circunvalación también serían de mayor ancho, exceptuando la calle Belgrano que, lindando con los fondos del Alto Godoy, sería menor.
También quedaron estipuladas las plazas de la ciudad: a la de mayor dimensión se la denominaría Independencia y las otras se llamarían Cobo, Chile, Lima y Montevideo. A los cinco nuevos espacios verdes se agregaría la plaza Buenos Aires, proyectada sobre la arteria que comunicaba con el este (actual calle Lavalle).
También, se destacó en la construcción de canales como el Canal La Paz, el de la Cañada de Moyano, pero una de la más importantes fue el proyecto de presa móvil para dotar al Canal Zanjón.
Medir con las estrellas
El agrimensor francés innovó, además, en la astronomía y la geodesia. Fue el primero en Mendoza que se preocupó por esta alta especulación matemática.
Para medir, se valió de la astronomía, y en 1868 inició dichas mediciones desde el “Cerro de la Puntilla" determinando el ángulo del norte verdadero. Realizó la centralización de la ciudad de Mendoza y la ubicó astronómicamente por medio de una triangulación geodésica. Su cálculos fueron tan precisos que muchos años después, este trabajo se utilizó a nivel nacional.
Hombre mirando al sur
Al poco tiempo, se casó con una reconocida dama de la ciudad, Aurora Suárez, y se establecieron en el sur mendocino, en una zona acosada por malones de indios. Pese a estas circunstancias desfavorables erigió un fortín llamado “Aurora” en honor de su esposa.
La construcción la realizó en 1871 y trazó, al mismo tiempo, la nueva villa del Diamante, y así se formó Cuadro Nacional. En 1884, Balloffet vendió a su compatriota Rodolfo Iselín, tierras pertenecientes a su esposa, lo que dio origen a la formación de la Colonia Francesa.