El tercer encuentro de la marca Jeep realizada en nuestro departamento ha sido todo un éxito con la participación de unas 90 camionetas, entre Jeeps y otras marcas, porque si bien es organizado por usuarios de esa marca, la participación es abierta a todos los usuarios off road con otras marcas y modelos.
El inicio fue el viernes en la mañana con la reunión frente a una estaqción de servicio cercana a la rotonda del mapa.
Allí, Hugo De Filippi, presidente del club Cherokeros.com.ar manifestó su satisfacción por la convocatoria en esta tercera edición, primera en nuestro departamento, en la que particiapn unas 90 camionetas, con personas provenientes de diversas partes del país, como también de Chile con 12 automóviles, Paraguay y Brasil, desde donde arribaron exclusivamente para participar del encuentro. “Lo más importante es la convocatoria”, dice De Filippi, “porque es un evento que no cuenta con el apoyo de la marca y reune a esta cantidad de participantes, lo que lo convierte en uno de los eventos off road más importante del país, del que participan todo tipo de conductores que buscan disfrutar y despuntar el vicio del “Trial”, sea la experiencia que tengan”, comentó
En la primera jornada se adentraron en las difíciles dunas de El Nihuil, donde los conductores fueron demostrando sus habilidades, algunos más expertos que otros, pero siempre con la premisa de pasar un buen momento a puro 4x4.
En este aspecto, quienes se destacaron fueron los visitantes transandinos, equipados con lo mejor en sus Jeeps, además de 3 modelos “Rubicon”, que despertaron la admiración de todos por la prestancia de esos verdaderos trepadores, ya que sus conductores parecían no esforzar los motores para pasar o subir por los lugares más difíciles.
También en las dunas, realizaron una especie de competencia de subidas y bajadas en la que participaban todos aquellos que quisieran hacerlo.
Ya de regreso, lo hicieron por un trayecto que conduce hasta el cerro El Nihuil, al que se llega por una agreste subida donde los “Jeeperos” hicieron nuevamente muestra de sus máquinas y habilidades en el todo terreno. Allí se detuvieron unos instantes desde donde apreciaron la maravillosa vista que ofrece la montaña del lago, lugar al que finalmente se dirigieron para recorrer la costa.
Finalmente por la noche se congregaron en un conocido restó, frente al aeropuerto donde recordaron anécdotas y programaron nuevas salidas.
Durante el sábado emprendieron otro trayecto donde tentativamente se manejaba un recorrido por el Cañón del Atuel o por Sierra Pintada.