Poco efectivo, calculadora en mano y tarjetas de crédito con escaso margen de gasto es el panorama que enfrentan los consumidores a dos semanas del inicio del ciclo escolar. Es que a las subas en los servicios públicos habrá que sumarle también el aumento, promedio, del 25% de la canasta escolar.
Es así que a un ritmo muy lento los padres ya se acercan a cotejar precios pero aún la mayoría no concreta las compras. “La gente pregunta mucho y recorre varios negocios antes de decidir qué adquirir”, dijo Nicolás Andrés Marco, uno de los dueños de la Librería Marco, ubicada en 9 de Julio 610 de ciudad.
El empresario fue muy concreto: “Las cartucheras y las mochilas con licencia fueron los artículos que sufrieron un mayor incremento, con subas de hasta el 35% inclusive” y “el resto de los productos como cuadernos, gomas, lápices, block de hojas, biromes, plasticolas, reglas y algunas carpetas no tuvieron mayores aumentos”.
Calcular cuánto dinero necesita un padre para mandar a un chico a primer grado no fue nada sencillo. Según Nicolás, “para empezar, sin tener en cuenta el guardapolvo, los zapatos y las medias, hay que calcular unos $600 como mínimo”.
Para llegar a esa cifra hay que olvidarse de una mochila con carrito, que cuesta como mínimo $350 y reemplazarla por una de espalda cuyo costo oscila entre los $150, las más baratas, y $890 las más caras. Las mochilas “premium” con carrito llegan a valer hasta $1.500, una cifra un poco lejana para el común de los ciudadanos.
En cartucheras hay una variedad importante de modelos, en esta librería la más barata sale unos $15 y la más costosa se acerca a los $320. En este sentido Nicolás mencionó que “a veces los padres gastan un poco más en función de la durabilidad del producto”.
Los lápices de colores no han sufrido grandes aumentos y los de marca cuestan entre $32 y $45. Tampoco hay grandes incrementos en los cuadernos de tapa blanda, por lo general los más usados en las escuelas públicas, con precios que incluso en algunos casos llegan a ser iguales a los del año pasado, informó el dueño del negocio.
En este escenario, Marco estimó que “recién para la primera quincena de marzo vamos a notar un mayor movimiento”. Respecto a la canasta escolar acordada por el gobierno nacional que incluye 27 útiles, el librero mencionó que “por ahora no tenemos esa oferta acá” y agregó que “la gente es reacia a comprar este tipo de canastas y prefiere armarla en la librería según sus posibilidades económicas”.
La misma pregunta se le realizó a un empleado de la librería Fénix quien el viernes informó que “no tenemos novedades acerca de la canasta armada por el gobierno” y confirmó lo mismo que Nicolás, “armamos la canasta en función del bolsillo del consumidor”.
Lo cierto es que por ahora hay mucha oferta y poca demanda. “El consumidor recién regresa de las vacaciones y son muy pocos los que pudieron comprar los útiles escolares”, señaló el dueño de la librería Marco.
Guardapolvos y uniformes
A los útiles escolares habrá que agregarles la vestimenta. Algunos podrán reciclar el guardapolvo o los pantalones de un hermano pero los que recién se inician en la primaria tendrán que echar mano a la billetera. Para primer grado, los guardapolvos oscilan entre los $129 y los $279, según el modelo y la tela utilizada.
Para los más grandes el precio varía según el talle. En una recorrida por un conocido local ubicado en el kilómetro cero, el precio no supera los $400.
Al guardapolvo habrá que sumarle el calzado. Un par de zapatillas sale alrededor de los $250 a los $400, según la marca.
Para los más coquetos, un par de guillerminas para mujer cuesta no menos de $700 y un zapato de varón se consigue a unos $500.
En resumen, un matrimonio que enviará por primera vez a un hijo de 6 años a un colegio público, gastará en vestimenta y calzado una suma piso de $379. Eso más los útiles escolares equivale a un desembolso cercano a los $1.000.
Para los privados, la cuenta es aún más abultada, un pantalón gris cuesta alrededor de los $355, una camisa blanca $189, un corbatín $39 y un par de medias $17. Si se le suma el calzado, un padre deberá desembolsar no menos de $1.000 en el uniforme escolar.