Marcelo Schmitt
Las cifras hablan por sí solas, entre marzo y agosto la Justicia local liberó 121 personas que fueron beneficiadas con excarcelaciones (que permiten la ley) en distintos delitos, de las cuales 67 fueron acusadas de robo agravado, algunas con arma de fuego. Los meses de marzo y agosto con 28 y 29 presos liberados fueron los meses más activos, según revelaron a este diario fuentes confiables que tuvieron acceso a estos datos.
Esta situación se da en el marco de un pico de inseguridad en la sociedad sanrafaelina, que demanda mayor protección. La ausencia de los juzgados de flagrancia les permite a los delincuentes pedir la excarcelación, un recurso que no es apelable y que otorgan los jueces de instrucción o el Tribunal Penal de Menores, que reemplaza por acordada de la Corte a las dos cámaras penales.
De esta manera, algunos delincuentes acusados de robo agravado por el uso de arma de fuego, un delito no excarcelable, logran salir rápidamente, lo que genera hasta malestar dentro de la fuerza policial.
Es el clásico "entra por una puerta y sale por la otra", dijo un reconocido abogado que prefirió reservar su identidad. El jurista explicó que "para acelerar los procesos y evitar estos recursos se hace necesaria la creación de los Juzgados de Flagrancia".
En ese sentido señaló de ejemplo un caso reciente en el que un joven sanrafaelino asaltó con un cuchillo a un taxista en la capital provincial y en 15 días lo condenaron a 8 años de prisión. "Esto en el Sur hubiera demorado no menos de 2 a 3 años para llegar al debate", mencionó.
Las estadísticas justifican la modificación que por ahora no se logró debido a la falta de presupuesto para crear fiscalías y nombrar empleados.
Los abogados oponen el recurso de la excarcelación durante el proceso y muchos consiguen la libertad de sus asistidos. Un ejemplo de la lista a la que tuvo acceso UNO San Rafael es el de un joven que ingresó en fecha del 7 de marzo a la cárcel por participar de un robo agravado con arma de fuego, en poblado y en banda, y un mes después fue excarcelado por un delito que prevé una condena de 5 a 10 años.
Otro ejemplo es el de otro joven encarcelado el 21 de marzo por robo agravado por el uso de arma de fuego, en poblado y en banda y daño agravado que fue liberado una semana más tarde. Otro ejemplo es el de un acusado por estafa, que fue encarcelado el 22 de mayo y liberado el 11 de junio.
Seguramente estas decisiones se justifican bajo una interpretación de la ley, aunque en esta época el debate bien vale la pena.
Así funciona el sistema judicial en el resto de la provincia
Los casos que atienden los juzgados de flagrancia son aquellos en donde la pena va de 3 a 15 años. En su mayoría atienden los delitos contra la propiedad, aunque también son sentadas en el banquillo aquellas personas que son acusadas de robo simple, robo agravado por el uso de arma blanca o de fuego o bien por su tenencia ilegal.
El sistema de juicios exprés o directísimos fue instrumentado en 2007 con la intención de acelerar los procesos de resolución judicial, sobre todo en los casos de delitos contra la propiedad. Comenzó a funcionar en Guaymallén a modo de prueba piloto y luego se amplió al resto del Gran Mendoza, salvo al Sur.
La implementación de estos procesos penales rápidos fue posible gracias a una ley aprobada en la Legislatura que ordenó modificar el Código Procesal Penal, en un contexto donde la inseguridad era el centro de la agenda política y social.
Estos juicios directísimos se aplican para los casos en los que el delincuente es atrapado in fraganti, en donde el peso de las pruebas es tan contundente que permite una rápida instrucción y una pronta elevación a debate oral. En el Sur aún no se terminan los exámenes de ingreso para nuevo personal. Sólo se rindió la parte práctica, faltando la teoría.
Reunión en Tres esquinas
Después del corte que hubo el viernes pasado sobre las rutas 143 y 165 tras la muerte de un motociclista, el miércoles próximo a las 19 se hará una reunión entre vecinos y autoridades municipales, provinciales y nacionales para modificar el actual derivador y solucionar los inconvenientes en el alumbrado público. Es que la muerte de José Guillermo Vergara colmó la paciencia de la gente que reclamó mejoras para el lugar. En el 2013, en ese mismo lugar, chocó contra un poste un micro repleto de alumnos de Buenos Aires.