La semana entrante estarán los resultados finales sobre la revisión de 3.200 casos de docentes que no están frente al aula por trabajar en cambio de funciones (bibliotecas, administración, etcétera), pero las cifras preliminares del análisis que hizo la Dirección General de Escuelas para definir si este grupo cobraba o no el ítem aula, indican que 2.000 docentes no pueden volver a dar clases por su estado de salud. Del resto, 200 aún no presentaron la declaración jurada para explicarle a la DGE su situación particular a pesar de que el plazo vence el domingo. Los 1.000 restantes estarían en condiciones de retomar la enseñanza.
Con este panorama, ya está claro que el pago del ítem aula será destinado a casi 3.000 personas más a partir del mes de agosto, como ya se había adelantado desde el gobierno escolar al momento de iniciar la revisión de cada uno de los casos en mayo pasado, tras varias polémicas surgidas porque había maestros o profesores que no cobraban este concepto por estar en cambio de funciones, o padecer enfermedades crónicas. Estas situaciones dieron pie al SUTE para atacar al ítem por considerarlo discriminatorio y propiciador de la asistencia de docentes enfermos a las escuelas. Incluso hubo una presentación en la Justicia porque coartaba la posibilidad de que mujeres víctimas de violencia de género se tomaran algunos días cuando debían enfrentar este tipo de problemas. Es que según el esquema de licencias cortas, un docente puede faltar 10 días al año por razones particulares, cuidado de familiar, fallecimiento, cursos, etcétera, pero no más de 3 días por mes.
Estos datos fueron ofrecidos por el titular de la DGE, Jaime Correas, tras anunciar el pago por única vez de dos adicionales: $875 en concepto de indumentaria para los celadores y otros $ 800 para útiles destinado a los docentes. Esa suma la recibirán durante el pago de haberes que se concretará hoy. Según el informe, la Provincia colocará en ambos complementos salariales una suma de $50 millones. Además, en este sueldo recibirán el segundo pago del incentivo docente de $300.
Buenos resultados
Correas y el ministro de Hacienda Martín Kerchner mostraron cómo fue el impacto de la implementación del ítem aula, que mejoró la asistencia de docentes y alumnos a las escuelas. También se refirieron al alcance del aumento salarial, para "aclarárselo a los docentes y a la sociedad en general sin la intermediación del sindicato".
En este punto, Kerchner ofreció varios ejemplos sobre la propuesta del Gobierno, que fue rechazada por el SUTE y que derivó en la decisión del gobernador Alfredo Cornejo de otorgar el incremento por decreto, con la homologación de la Legislatura.
En este contexto, un maestro que se inicia –sin antigüedad y sin zona– terminará cobrando en diciembre $9.046, lo que implica un aumento en términos absolutos del 43% más respecto a los $6.322 que cobraba en febrero de este año. Mientras, los maestros con 10 años de antigüedad y sin zona recibieron 32% de incremento; un director de secundaria con 20 años de antigüedad 25%, y un profesor con un solo cargo, de 18 horas, un aumento del 24%. Por supuesto que los profesores de media tienen varias escuelas. En cuanto a los celadores, en febrero cobraban $6.271 y desde agosto cobrarán $7.763, lo que significa que su sueldo sólo aumentó 24%.
Sin embargo, tanto Correas como Kerchner defendieron los resultados "porque se dio un aumento que la Provincia podía pagar hasta el final de 2016, privilegiando a los de menor salario y a quienes estaban frente al aula, gracias al aporte nacional con el pago del incentivo docente y el ordenamiento de las cuentas públicas de la Provincia".