Modelos con corona

La Vendimia es un semillero de chicas bonitas y son cada vez más las que, sacándole el jugo a la generosidad que con ellas tuvo la madre naturaleza, añaden a un posible rol político, cargo municipal y compromiso social, desfiles en pasarelas y campañas gráficas.

Algunas utilizaron el reinado para contactarse con agencias publicitarias, mientras que otras ex soberanas comenzaron en la adolescencia (a los 13 o a los 15 años) interrumpiendo su porvenir de modelo por el trono real. Inocentes quienes, como María Flor Destéfanis, nunca se imaginaron tal futuro y cayeron en la tentación de ponerle el cuerpo a los encuentros de moda, esos que alguna vez pispearon con corona puesta.

La “Eva” mendocina

La encargada de romper el rígido molde de la reina de aspecto preservado fue Gisela Gaviola, soberana de Las Heras, en 2003. Una precursora de lo que el boca en boca tildó en los últimos años como “reinado hot”, si bien para la sensual morena su caso dista mucho del de las delegadas actuales del destape. “No fue un objetivo que perseguí cuando tuve la corona, como sucede ahora. La Municipalidad pensó en las fotos donde me veía ataviada con hojas de parra como una estrategia publicitaria. No me arrepiento”, dice del otro lado del teléfono la chica de 28 años. Reconoce que la exposición en la vía pública “como Dios la trajo al mundo” le trajo posibilidades laborales inusitadas.

En la carrera de las pasarelas arrancó adolescente –tenía sólo 15 cuando se inscribió en una agencia de modelos– y decidió suspender sus labores de chica fashion por la responsabilidad emanada de la Vendimia. “Por eso me enoja ver que hay chicas que renuncian tentadas por la exposición. Me ofende como ex reina y lasherina”, comenta en alusión a la ex reina Flor Laguna, la chica “hot” de 2011.

“Decidí manejar mi carrera, porque muchas veces los intereses de los empresarios no coinciden con los nuestros”, relata una de las pocas que probaron suerte en otros territorios, luego de ganar concursos en Buenos Aires y Chile, y haber sido tentada para ir a Europa.

Modelaje interrumpido

De 2003 a 2009 las cosas cambiaron y la soberana lujanina Daniela Maldonado, a quien se le atribuyó por primera vez el calificativo de “hot”, acaparó las portadas de los diarios cuando un anónimo difundió en la web fotos caseras de ella, en ropa interior y con gesto erótico.

De su costado provocativo Daniela no está dispuesta a hablar, pero accede a relatar sus pasos como modelo. También arrancó a los 15 en la agencia de Gabriel Canci y después de ser tapa de la revista Touch, sumar al book personal varios Hyatt de Moda –además de mostrarse en la TV degustando una gaseosa–, suspendió su carrera por otro trabajo. Cada mujer es un mundo y así como para otras soberanas las chances se multiplicaron después del reinado, Daniela (22) dice: “Todo lo conseguí sola”.

¿Es la chica de la publicidad?

Siempre la compararon con Blancanieves, por su imagen angelical y sus ojos claros. Y Nadya De Longo (23), la estudiante de diseño gráfico que se consagró como la virreina nacional de 2009, escondió detrás de ese perfil una femme fatal que no tardó en asomar por estas tierras.

Trabaja en el ámbito público y desde su coronación fue tentada para plegarse al mundo de las “90-60-90”. “Nunca acepté, pero cuando llegó la chance de hacer publicidades gráficas, me animé”, dice la godoicruceña aclarando: “No me considero modelo y sólo hago fotos porque desfilar me da mucha vergüenza”.

Es la cara de un spa y su figura aparece en gigantescos anuncios callejeros, para el deleite de conductores y peatones . “No me llaman para producciones provocativas”, admite.

Rubia precozCandela Carrasco nunca escondió su faceta de modelo. La pospuso, claro, cuando obtuvo la corona principal en 2009.

Incursionó en las pasarelas y producciones gráficas de la mano de Gabriel Canci con apenas 13 años. Su carrera fue vertiginosa al punto de que cuando terminó su mandato, concursó por Miss Universo Argentina 2010.En primer año de Recursos Humanos, la rubia oriunda de San Martín dice que al principio tuvo que modificar muchas cosas, como su físico, un tema tabú en el mundo de las pasarelas. “No tenía el cuerpo perfecto, ni la experiencia”, relata quien, además, critica la falta de responsabilidad de ciertas colegas: “No podés dejar un compromiso como es llevar los atributos vendimiales”.

Desfilar para divertirseCombinar una carrera de abogacía, con el compromiso social y los desfiles no es para ella contradictorio. Así lo entiende Flor Destéfanis, a quien no pocos le atribuyen cualidades para proyectarse en el ámbito de la política. “Soy una chica coqueta, pero debo confesar que es un juego para mí esto de ser modelo”, expresa la Reina de 2010, quien se ríe de su inexperiencia:“Lo que importa es la naturalidad, cero complejo”.

Para ella, todo empezó en Vendimia: “Cuando fuimos a Los Ángeles, Norma Canci (la madre del productor y empresario Gabriel Canci) me dijo que tenía pasta para esto”. La Reina del Bicentenario adelanta que del mismo modo en que acepta desfilar accede a conducir eventos, “todo lo hago por diversión, no veo mi futuro atado a esto”.