convocatoria en ese sentido ante la Presidencia de la Cámara baja. Asílo confirmó a Noticias Argentinas el diputado de la UCR Rubén Lanceta, y afirmó que "todos losbloques de la oposición" están de acuerdo con la realización de una sesión especial. Enhoras de la tarde se reunieron para delinear la estrategia diputados del radicalismo, la CoaliciónCívica, el PRO, el Peronismo Federal, socialismo, el GEN y el interbloque de once legisladores decentroizquierda, que tuvo como representante a Claudio Lozano. Laclave del éxito de la convocatoria estaba precisamente en la aceptación o no del sector queencabeza el titular de Proyecto Sur, Fernando "Pino" Solanas, ya que sin su acompañamiento, laoposición más dura no lograría el quórum de 129 diputados para iniciar la sesión especial. Sibien ese espacio insistió durante las últimas semanas en que no asistiría a una sesión especial -alconsiderar que los debates deberían ser ordinarios-, el fracaso de ayer y la actitud deloficialismo de no bajar al recinto para "tratar la discusión" hicieron cambiar de parecer a los decentroizquierda."Nosotros después de lo que pasó ayer creemos que hay que hacer una sesión. No estamos en desacuerdo con unaespecial la semana próxima", resaltó el diputado de ese espacio Eduardo Macaluse en diálogo conNoticias Argentinas. Asu vez, sostuvo que cambiaron de postura tras el episodio que se vivió este miércoles en Diputados,cuando -dijo- el "oficialismo se negó a debatir". Ladiputada de la Coalición Cívica, Patricia Bullrich, a su vez, detalló que a la reunión asistierondiputados de todas las bancadas, y aseguró que se comprometieron a "poner mucho esfuerzo" parasentar a todos sus representantes en el recinto el próximo martes."Nosotros en la sesión de ayer estuvimos completos y queremos que ahora todo hagan un esfuerzo fuerte paraque todos sus diputados se sienten en sus bancas", enfatizó Bullrich en declaraciones a NA, enreferencia a la tardanza de algunos legisladores ayer a la hora de arrancar la sesión enDiputados. Eltemario para el martes será el mismo que la oposición pretendía llevar este miércoles al debatefrustrado: el rechazo del DNU 298 de uso de reservas del Banco Central, proyectos de nulidad delFondo de Desendeudamiento Argentino y el pedido que impulsa la centroizquierda para que el PoderEjecutivo mande una ley correctiva del Presupuesto 2010. Deesta forma, el antikirchnerismo busca tomar la iniciativa en el Congreso y poner en funcionamientopor lo menos a la Cámara baja, en momentos en que el oficialismo ya avisó que usará la herramientadel quórum para impedir los debates que no crea convenientes. Seráuna apuesta elevada, ya que el éxito representará un alivio para las tensiones internas y unavictoria opositora de cara a la sociedad, en tanto que otra decepción afilaría las diferencias y seinterpretaría como un punto a favor del Gobierno.