En un clima tenso, y ante la atenta mirada de las provincias, en especial de la provincia de Buenos Aires, gremios provinciales adheridos a CTERA en todo el país dijeron que si no hay acuerdo con Nación realizarán una huelga de dos días entre 5 y 6 de marzo próximos, y una jornada de protesta nacional, con movilizaciones, este miércoles.
El gremio docente decidió también elevar una denuncia a la Organización Internacional de Trabajo (OIT) si el gobierno decide por decreto el sueldo mínimo para los trabajadores de la educación.
La CTERA reclama un sueldo mínimo de 4.860 pesos -35% sobre el actual- y que el aumento se pague íntegramente antes de la finalización del primer semestre para paliar la inflación, y una cláusula de actualización salarial en caso de que los precios superen el aumento otorgado.
Los gremios enrolados en la CTERA anunciaron las medidas de fuerza luego de rechazar un aumento del 22% en tres cuotas, más un adicional de 2.000 pesos por presentismo que les ofreció el gobierno.
El nuevo sueldo inicial reclamado por la CTERA equivale a un aumento del 42% sobre el actual sueldo básico de 3.416 pesos, que es aún inferior al sueldo mínimo vigente a nivel nacional.
El anuncio fue realizado en conferencia de prensa por la secretaria general del gremio, Stella Maldonado, quien, a esa hora, expresó que "no nos ha llegado ninguna convocatoria" del gobierno para reanudar las negociaciones de la paritaria federal.
La dirigente señaló que el paro se efectuará "si en la convocatoria que tengamos del gobierno no podemos llegar a un acuerdo o se procede a fijar el piso salarial por decreto" por parte del gobierno.
Los docentes anunciaron una jornada de movilizaciones para el miércoles 26 de febrero y señalaron que en cada provincia tendrá una modalidad diferente.
Los dirigentes explicaron que en algunos provincias se tratará de marchas para reclamar negociaciones paritarias y en otros directamente un paro para reclamar a las administraciones que aumenten los salarios.
Por su parte, el titular del Sindicato de Trabajadores de la Educación de la Provincia de Buenos Aires (SUTEBA), Roberto Baradel reclamó que el gobierno "tenga en cuenta que el salario docente es también una variable pedagógica, porque hay maestros que enseñan en aulas superpobladas y se enferman".
"Estamos esperando una convocatoria del gobierno, quien debiera tener en cuenta el deterioro del poder adquisitivo de los salarios que provocó la devaluación", añadió el titular de SUTEBA.
Baradel dijo que "los intereses corporativos que provocaron la devaluación son los que ahora se quieren apropiar de los salarios".
"La batalla de los precios aún no está ganada, el mismo sector que provocó la devaluación sigue aumentándolos y deteriora los salarios y el gobierno debería entender que si eso sucede se afecta el consumo y las fuentes de trabajo", agregó el gremialista docente.
FUENTE: Noticias Argentinas