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La falsa denuncia de secuestro mantuvo ocupado al Servicio 911 y a la Justicia durante casi toda la mañana de este lunes.

Inventó la historia de un secuestro para evitar rendir un examen

Por UNO

Más de 50 patrulleros, 52 motos y unos 300 hombres se movilizaron en Tucumán buscando a una adolescente de 19 años que según denunció una amiga habían secuestrado, finalmente se comprobó que la estudiante inventó esa historia para evitar rendir un examen. La falsa denuncia de secuestro mantuvo ocupado al Servicio 911 y a la Justicia durante casi toda la mañana de este lunes.Según consta en las actuaciones policiales, una chica domiciliada en Las Talitas, se acercó a un agente que estaba de parada en La Rioja y Las Piedras para denunciar que había visto el secuestro de una chica. El uniformado dio a conocer la novedad y, en cuestión de minutos, personal del 911 salió a la calle en busca de la víctima.La testigo, cuyo nombre se mantiene en reserva por cuestiones legales, no tuvo problemas en presentarse ante la fiscal Adriana Giannoni para contar lo que supuestamente había visto. Contó que ella estaba parada cuando observó a un hombre haciendo ingresar a un automóvil a una chica de su edad, si bien no pudo identificar el color del vehículo, dijo que se trataba de un Volkswagen Gol. Su versión cobró mayor fuerza cuando brindó a los investigadores los detalles físicos de la supuesta adolescente secuestrada. Con todos esos elementos, Giannoni y el comisario Luis Bacas, director general de Prevención Ciudadana, acordaron realizar un trabajo en conjunto para poder dar con la víctima.El primer paso fue destinar personal del Centro de Monitoreo para tratar de ubicar al sospechoso. Los patrulleros del 911 les ordenaron que detuvieran a los vehículos de ese modelo que tuvieran como ocupante a una menor. A la búsqueda también se sumó personal de la Guardia Urbana. En total, según confirmó el comisario Bacas, publica hoy La Gaceta de Tucumán, se movilizaron más de 50 patrulleros, 52 motos y unos 300 hombres. Pese a que no se movilizaron, las comisarías del Gran San Miguel de Tucumán (Yerba Buena, Tafí Viejo, Alderetes, Banda del Río Salí y Lules) estaban al tanto de lo que estaba sucediendo y esperaban la orden para salir a la calle.Cuando se incrementaba el operativo de búsqueda, la fiscala Giannoni recibió un insólito llamado. Una mujer, que se identificó como la madre de la joven denunciante, le contó que su hija había inventado esa historia porque no estaba preparada para rendir ayer una materia. Los investigadores, sin salir de su asombro, ordenaron a los policías que culminaran con los operativos. Ahora, la Justicia deberá definir si a la chica de 19 se le hará una causa por haber realizado una falsa denuncia.

Otro susto

Pero ese caso no fue el único que generó alarma en la Justicia y en la Policía. Cerca del mediodía, una mujer llamó al Servicio 911 para denunciar que su hijo de 10 años había sido secuestrado en la zona de la plaza Belgrano por un hombre que se movilizaba en una motocicleta. La madre del pequeño les dijo a los investigadores que su hijo la había llamado porque un motociclista le había pedido el celular para llamar a su casa, ya que tenía una emergencia familiar. Ella lo autorizó a que le hiciera ese favor. Esperó unos minutos para volver a comunicarse con él. Como no le contestó, realizó la denuncia. Bacas, por pedido de Giannoni, volvió a movilizar a la fuerza en búsqueda del menor. Pero, en este caso, la desesperación no duró tanto. El niño logró comunicarse con la madre y le contó que el hombre, cuando le alcanzó el teléfono, huyó del lugar con el aparato. Bacas se entrevistó con la madre de la víctima y después de constatar la versión, por segunda vez en la mañana, ordenó frenar la búsqueda.