Pero nada de ello pasó y la glamorosa celebración, que comenzó a gestarse en 1906 con laprimera comisión organizativa, recuperó el centro de la escena. A los desfiles militares, galas teatrales, banquetes, congresos, ceremonias religiosas yexposiciones se sumó la llegada de numerosas comitivas internacionales. Entre los visitantes ilustres se destacó la presencia de la Infanta Isabel de Borbón, quepronto ganó la atención local. Su regalo fue no menos importantes: la piedra fundamental del hoy"Monumento a los Españoles". Otro monumento históricos que fue ofrendado al país como motivo de los festejos delCentenario fue la mítica 'Torre de los Ingleses', ubicada frente a la Estación de Trenes de Retiro. También fue parte de los regalos la figura de Cristóbal Colón de unos 6 metros de alto quese encuentra emplazado en los jardines de Casa de Gobierno con la mirada puesta en lo que hoy esPuerto Madero, entre otros tantos. Entre el festejo y la tensión social Por aquel entonces, y tal como sucede con la celebración del Bicentenario, el Teatro Colónse transformó en el centro de los festejos con sus funciones de gala. También se montaronexposiciones abiertas a todo público sobre la hoy Avenida del Libertador, que se dividieron entemáticas: agricultura, bellas artes, higiene, industria, y transporte y ferrocarriles. Sin embargo no todo era algarabía. El clima social estaba enrarecido por un elevado númerode huelgas y disturbios que amenazaban con empañar la celebración y que llegaban desde sectoressindicales anarquistas y socialistas. El presidente José Figueroa Alcorta debió afrontar fuertes protestas sociales a las quereprimió con dureza. El sistema electoral fraudulento seguía siendo uno de los problemas claves deun país optimista, que soñaba con transformarse en una potencia mundial, apoyado en su título de "granero del mundo". El 14 de mayo de 1910 una seguidilla de huelgas puso en riesgo los festejos. El Gobierno deFigueroa Alcorta declaró el estado de sitio en todo el país. A pesar de ello, semanas después unabomba estalló en el Colón. Entre las curiosidades que dejó el Centenario se destaca la decisión del Banco de Préstamosde devolver los objetos que habían sido empeñados sin pedir el reembolso del dinero adelantado. Encontrapartida, el Estado se hizo cargo de todos los gastos de las comitivas internacionales, queademás de hospedarse en lujosos hoteles tuvieron vía libre para adquirir "souvenirs" de su visitaen la Avenida Alvear. Muchos invitados inescrupulosos fueron más allá del simple presente yaprovecharon para comprar joyas de colección. Dos caras de una misma moneda....allá por 1910. /ANDREA RIVAS Video: Visita Buenos Aires la infanta Isabel, en representación de los reyes de España,para los festejos del centenario de la patria.
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La foto muestra cómo se vivió el 25 de mayo de 1910 en la plaza de Mayo de Buenos Aires.
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Celebraciones en plaza de Mayo.
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Celebraciones en plaza de Mayo.
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El presidente Figueroa Alcorta en las celebraciones en plaza de Mayo.
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Las celebraciones del Centenario de Argetina en plaza de Mayo.
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La plaza de Mayo, de noche, en la gala de los 100 años de la patria.