Desde su clara alusión a los desaparecidos hasta los consejos sexuales-gastronómicos queincluyen el cerdo como alternativa al Viagra hasta los términos lunfardos para referirse a suestrategia política, aparecen elucubraciones en el ámbito político y de publicidad que plantean laposibilidad de que la mandataria haya decidido cambiar para parecer "más popular" o tapar elescándalo por los decretos de necesidad y urgencia que le retruca la oposición y analiza elCongreso. "
La ingesta de cerdo mejora la actividad sexual. Es mucho más gratificantecomerse un cerdito a la parrilla que tomar Viagra", recomendó la mandataria esta semana. En su escalada de humoradas, el pico más alto llegó a mitad de semana, con sus sugerenciasalimentarias. La mandataria, "fanática" confesa del cerdo, aclaró que no lo decía "para quedarbien" o hacer "propaganda de nada", y contó su propia experiencia. "El anterior fin de semana, cuando estuvimos en El Calafate, en lugar de corderito nos comimos un cerdito a la parrilla riquísimo, al aire libre. No sólo me comí la carne, sino tambiénel cuerito crocante hecho galletita, algo riquísimo. Impresionante", detalló La mandataria también aconsejó comer pollo "porque ayuda a bajar de peso" a quienes lonecesitan y a "mantenerse en forma" a los que están flacos. "Si uno está delgado y, además, haceactividad física, entonces siente que tal vez pueda volar con sus sueños, como los pollos", dijo enla semana que se mostró de buen humor, aunque algunos atribuyen todo a una estrategia para mejorarsu imagen en las encuestas.