Amalia acorraló al jefe de Gabinete K

insistía con sus duras réplicas al funcionario.

De entrada Fernández refutó todo lo que Petinatto dijo en el monólogo en contra del Gobierno,

pero hasta ahí el tono se mantuvo amistoso y en clave de humor. La tensión subió cuando la rubia

panelista espetó: "El Gobierno está ciego, no se cuál es la realidad que viven, no quieren ver lo

que pasa, el país es un desastre".

El monólogo y el cruce entre Granata y Fernández.

En uno de los bloques, (Desaforados por la web) Fernández contestó los comentarios que le

leía Pettinato, casi todos críticos, de los usuarios de Facebook, por haber invitado al funcionario

K.

Una de las partes más duras se produjo cuando Granata lo cruzó sin medias tintas: "Parece que

estuviera hablando de un país europeo y no de la Argentina". "Tenés que conocer un poco más para

hablar", retrucó el Jefe de Gabinete, ya nervioso, pero Granata siguió pegando "yo voy al

supermercado, pago las cuentas, sé lo que pasa, no vivo en una nube...".

Fernández también debió defender los 600 millones de pesos que cuesta el fútbol de las

ironías de Pettinat, quien, no obstante en un tono mucho más amigable al de Granata, cuestionó por

ejemplo la profusa publicidad de obras públicas en las transmisiones de fútbol y la escasa

publicidad comercial.

Para el final, pero sin romper el hielo del tono del programa -que mutó del clásico

humorístico a pseudo político- quedó la pelea en el ring de Clarinete y Pingüino, en obvia alusión

a los enfrentamientos del ex presidente y el poderoso multimedios. Anibal soportó la humorada con

cara de pócker y sin comentarios que pudieran ponerlo contra las cuerdas: "No voy a perder el

trabajo por una tontería", fue lo único que acotó.

La pelea entre Clarinete y Pingüino