Como no podía ser de otra manera, Fernando Cavenaghi se despidió del fútbol convirtiendo cuatro goles, en un partido homenaje que se realizó en un estadio "Monumental" que le regaló múltiples ovaciones.
Rodeado de todos sus afectos y de muchos otras glorias de River, el "9" consideró que "el sueño de todo jugador es despedirse de esta forma".
"Ésto no es una despedida, sino un homenaje porque yo de este club no quiero irme nunca más", dijo Cavenaghi, quien tuvo tres ciclos en la institución que lo cobijó desde los 13 años, cuando llegó con el bolso cargado de ilusiones desde O Brien, una localidad de Bragado, en la provincia de Buenos Aires.
"Soy muy agradecido a este club. Viví toda una vida acá. Estuve en la pensión, estudié en el colegio. Le debo muchísimo a River", expresó.
En el partido, casi una anécdota, ganó el equipo "Blanco" 6 a 4 al "Rojo", con la particularidad que Cavenaghi marcó cuatro tantos, dos para cada combinado.
