Una sola situación genero dos contradicciones. La primera: echar a Leonardo Astrada, cosa que se
había prometido en la campaña electoral que no se iba a hacer. La segunda: contratar a Ángel Cappa
y no a Ramón Díaz, con quien el Kaiser había tenido un acer
Una sola situación genero dos contradicciones. La primera: echar a Leonardo Astrada, cosa que sehabía prometido en la campaña electoral que no se iba a hacer. La segunda: contratar a Ángel Cappa
y no a Ramón Díaz, con quien el Kaiser había tenido un acercamiento también a fines del 2009.¿Tiene derecho Passarella a cambiar? Por supuesto que sí, sobretodo en el primer punto. Astradano le encontraba la vuelta al equipo, los cambios permanentes confundían más de lo que aclaraban y
ningún sentido tiene insistir en lo que no funciona y no da resultados.También tiene derecho a contratar a Ángel Cappa, un verdadero filósofo del fútbol, con undiscurso seductor y con un buen antecedente de su anteúltimo Huracán. El equipo del tiki-tiki jugó
un excelente fútbol en el Torneo Clausura 2009, sólo perdió el título en la última fecha frente aVélez con un polémico arbitraje de Gabriel Brazenas, pero armó un equipazo con Toranzo, DeFederico, Pastore, Bolatti, Araujo y Arano, entre otros. Paolo Goltz y Eduardo Domínguez secomplementaron muy bien como dupla central de zagueros.Esa fue la primera imagen, espectacular por cierto. Angelito se agrandó, aseguró que aquello fuelo mejor que le paso al fútbol argentino en los últimos 20 años y después reconoció que se había
equivocado. En el Apertura 2009 se le desmembró el plantel, se tuvo que ir con muy pocos puntoscosechados, y Carlos Babington tuvo que llevar a Héctor Rivoira para no correr riesgos dedescender, un técnico que saque puntos.Es una apuesta muy fuerte, todo un mensaje, un discurso que desdramatiza en un momento que esdramático como nunca por el promedio que acecha y el descenso, que es una realidad posible para
River Plate por primera vez en su historia. Si le sale bien será un golazo, el público millonariose enamorará de un River Plate que jugará el fútbol que le gusta a la gente. Si sale mal, habrádilapidado buena parte de su capital político conseguido en las históricas elecciones de diciembredel 2009.Lo que Passarella hizo en 24 horas todavía no lo pudo hacer Boca en tres meses: designar unnuevo entrenador. Hay que esperar para saber cuánto dura el efecto generado por Roberto Tito
Pompei. Por lo pronto, Boca jugó el lunes su mejor partido del año; Juan Román Riquelme la rompió,jugó realmente como los dioses, le pasó la pelota a Palermo, 'toma Martín hace el gol 219 y entraen la historia', pensó Román, y Palermo lo hizo, la empujo dos veces, llegó a los 220 goles con lacamiseta de Boca, no habrá otro goleador igual, no habrá ninguno.Pelé dijo que para ser una leyenda hay que hacer 1.000 goles, no O Rei, Martín Palermo ya es unaleyenda. En su peor momento en cuanto a la lucha por integrar la lista de 23 jugadores que irán al
Mundial esta actuación y los goles le vinieron como anillo al dedo para estar otra vez en laconsideración del Diez.La familia boquense dio su veredicto: Palermo y Riquelme tienen que jugar en Boca, si Macriquiere echar a Román los platos rotos los pagará Ameal. Hoy la cosa está así: Palermo 90% adentro,
Riquelme 50% que sigue, Guillermo 15% que viene y prácticamente afuera. No hay un candidato que lesguste a todos, y si Pompei gana los 5 partidos que faltan... esperemos. Edgardo Bauza gusta, pero enla Liga de Quito cobra 120 mil dólares por mes.¡Qué lunes por Dios! ¡Qué campeonato se armó! Godoy Cruz puntero, una formación de Omar Asad enestado de gracia, le salen todas. El que juega la rompe y hace goles, Jairo Castillo, Federico
Higuaín, Daniel Vega o César Carranza, extraordinaria presentación del Turco en la primera divisióndel fútbol argentino, pero lamentable la pelea final con Ricardo Caruso Lombardi.Estudiantes también está en la pelea, sin Verón y Boselli jugó su mejor partido del campeonato ymató a un Racing inexpresivo, lamentable, una invitación al ataque del rival, así hasta puede
perder la categoría. El Pincha pelea la Copa y el campeonato.Argentinos Juniors de la mano de Claudio Borghi quiere volver a las grandes épocas, juega mejorque Independiente, tiene plantel, desea alcanzar la gloria y el Bichi armó un equipo bien made in
La Paternal.Nos esperan cinco fechas increíbles, cuatro equipos separados por un punto con chances de dar lavuelta, aunque yo le juego un boleto todavía a ese ganador llamado Américo Rubén Gallego.
