Por Leonardo Ruiz[email protected]
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Sí, el Bebu Girolami lo hizo otra vez. Por tercera ocasión, sobre tres clasificaciones disputadas en lo que va de la temporada, el piloto del Torino amarillo se quedó nuevamente con el mejor tiempo del sábado, tras la segunda y definitiva tanda clasificatoria, válida por la tercera fecha que tiene como escenario el flamante autódromo Ciudad de San Martín.
Y no solo fue que el piloto cordobés mantuvo su registro del viernes, sino que lo bajó en más de siete décimas (su tiempo de ayer fue de 1m30s244), gracias al gran vehículo que le entrega el equipo Maquin Parts.
La diferencia sobre el resto fue tal, que al segundo en la clasificación, el bonaerense Matías Rossi (Chevrolet), le sacó más de medio segundo, y solo cinco máuinas quedaron encerrados en el segundo, algo inusual en estas épocas del Turismo Carretera.
Por más que Girolami se canse de decir que “el auto funciona a la perfección con gomas nuevas y el deficit está con los neumáticos usados”, no hay dudas de que es el gran favorito para quedarse con el triunfo en el Este mendocino, algo que no ha podido alcanzar en las dos carreras anteriores donde también dominó en clasificación.
Su escolta, Matías Rossi, hizo una gran vuelta, quedó a 531 milésimas, pero nada pudo hacer con el potencial del Torino.
El tercer puesto fue para Mariano Werner (Ford), de quien se esperaba más en la jornada de ayer. Pero el ex campeón dela Fórmula Renault tuvo inconvenientes con el sistema de la caja de velocidades y se tuvo que conformar con el tercer lugar, que no es malo ya que largará en punta la tercer serie selectiva.
Sin dudas, la gran sorpresa del sábado fue la performance de Claudio Kholer (Dodge), en su tercera carrera en la categoría.
Y para ratificar el muy buen rendimiento de los motores Cherokee en el Este mendocino (hay tres entre los primeros cinco), la quinta colocación fue para Jonathan Castellano (Dodge) que empató el tiempo con Kholer, pero como lo hizo después, perdió el cuarto puesto.
Guillermo Ortelli (Chevrolet) fue otra de las que decepcionó. La jornada del sábado la había arrancado muy bien, marcando el mejor tiempo en los entrenamientos, pero en clasificación no lo pudo ratificar. Además, el actual campeón tuvo que penalizar con seis décimas, ya que cambió el motor de su máquina.