El polémico delantero de River Plate quedó otra vez en el ojo de la tormenta luego de varias actitudes reprochables para con sus compañeros y dirigentes.
El delantero Teófilo Gutiérrez recibirá un reto de las autoridades de River tras un desplante a la prensa que, en opinión de la nueva conducción del club, daña la imagen institucional.
Gutiérrez interrumpió sin motivos ni explicaciones una rueda de prensa en Tandil, después de que le pidieron opinión acerca de la idolatría de la gente de River por Enzo Francescoli, hoy en el área fútbol de River.
La reacción del colombiano -que tuvo gran repercusión y ya ha recogido fuertes críticas- no cayó bien en los directivos y uno de ellos deslizó que tendrá que sentarse a escuchar las normas de convivencia que impone River.
Concretamente, al colombiano lo espera una reunión con Rodolfo D´Onofrio y Enzo Francescoli, adelanta este jueves el diario Olé en su versión digital.
Las críticas de la prensa contra Gutiérrez son hoy severas porque se le reprocha desde su ataque armado a sus compañeros de Racing en los vestuarios del estadio de Independiente, hasta el frío recibimiento que le tributó en los hechos a su nuevo compañero Fernando Cavenaghi.
Respecto a esto último, se afirma que su discurso elogioso no concuerda con la indiferencia con que se presentó en la intimidad del plantel.
"Tengo frío" o "me tenía que ir a cenar" han sido las explicaciones del controvertido futbolista, cuando debió decir por qué bajó tarde a la rueda de prensa o contestó preguntas apenas durante siete minutos.
