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El piloto oficial de Peugeot se presenta en Viedma. Tras subir al podio en su debut en el Súper TC2000 buscará mantener protagonismo.

Santero, con muchos desafíos por superar

Por UNO

El debut fue tan positivo, que ni siquiera lo había imaginado. El podio en su primera carrera en el Súper TC2000 significó para Julián Santero haber superado sobradamente una de las primeras pruebas a las que lo someterá el automovilismo de primer nivel.

“Nunca me presioné y en todo momento traté de tomarme con mucha tranquilidad mi debut en la categoría, pero no puedo dejar de reconocer que haber subido al podio en Rafaela me relaja mucho más y hace que ahora encare estas fechas con mucha confianza”, se sinceró el piloto mendocino que integra el Puegeot Lo Jack Team.

Sabido es que la categoría no permite pruebas entre carrera y carrera, y a raíz de eso consultamos a Julián sobre cuáles son los trabajos que realiza el equipo en conjunto con sus pilotos. “No hay mucho por hacer, en el taller se repasa absolutamente todo para que quede en condiciones y yo particularmente me dedico a buscar datos y ver la mayor cantidad de cámaras a bordo posibles. Yo nunca corrí en Viedma y entonces llego con algo de desventaja, pero en San Luis me prestaron algunas de cuando corrió el Top Race y obviamente me sirvieron de cara al fin desemana”, afirmó.

“El circuito de Viedma es muy parecido al de Neuquén, algo así como un espejo uno de otro. Son curvas planas y la realidad es que no imagino un fin de semana fácil. Habrá que trabajar mucho para ser protagonistas y no lo digo sólo por mi, sino también por mis compañeros”, analizó Julián.

Santero, además, tendrá que penalizar 12 lugares luego de la clasificación por su tercer puesto en Rafaela, algo que lo puede condicionar a la hora de correr la serie y la final.

“Obviamente, tendremos que hacer una buena clasificación porque eso nos hará correr un poco más aliviados la serie. No tengo dudas que será un fin de semana muy complejo pero con muchos desafíos por delante y eso es algo que me entusiasma”, cerró el chofer del 408 número 27.