El local fue quien ejerció el control de la pelota y el dominio territorial, aunque le costó quebrar la férrea defensa de la visita que por momentos jugó con dos lineas de cuatro.
El Cervecero afrontó el compromiso con múltiples precauciones y apostó a capitalizar algún error del adversario para alcanzar la apertura del marcador.
Un remate de Nicolás Pasquini a los 17 del primer tiempo para el local y un cabezazo de Sebastián Martínez a los 36, en posición adelantada que el árbitro Trucco no advirtió, fue lo más destacado de una primera parte en la que hubo mucha pierna fuerte y poco juego.
Ricardo Caruso Lombardi, a los 39 minutos, dispuso el ingreso de Telechea por el lesionado Hipperdinger quien abandonó el campo de juego tras una entrada fuerte de Goltz que le provocó un corteen el tobillo izquierdo.
La primera mitad resultó tediosa debido a que Quilmes cedió la iniciativa y el Grana no supo administrar correctamente la pelota. Intentó abrir los caminos al gol tratando de utilizar todo el ancho de la cancha recurriendo a la imaginación de Jorge Pereyra Díaz y Junior Benítez pero tropezaron una y ora vez contra defensa visitante.
Caruso Lombardi dispuso un equipo corto, con dos líneas de cuatro con el claro objetivo de presionar y restarle espacio de maniobra al estratega del equipo Jorge Ortiz, quien prácticamente no gravitó.En ese marco el partido dejó lo futbolístico de lado y se tornó violento y obligó al árbitro Trucco a sacar varias veces la tarjeta amarilla.
En solo cinco minutos el equipo del Mellizo tuvo tres jugadores amonestados lo que condicionó aún más su juego. A los 7 minutos del segundo tiempo Lanús logró llegar con chances hasta el arco defendido por Dulcih pero Pereyra Díaz definió sobre el travesaño.
De poco Lanús fue metiendo a Quilmes contra su arco que se las ingenió para aguantar el cero achicando y marcando en todos lossectores del campo de juego. Parecía que se le escapaba el partido a Lanús hasta que Chamorro logró generar una gran jugada en ataque entregó a Alejandro Silva practicó un centro pasado de derecha a izquierda que Pereyra Díaz definió con un cabezazo que no le dio chance a Dulcich.
Tras la apertura del marcador Lanús sufrió la furia de Quilmes que desesperado salió a buscar la igualdad pero en esos momentos apareció la figura de Marchesini en toda su dimensión al ahogar el grito de gol en tres ocasiones.