El español ganó por 6-4 y 7-5 en un duelo que mezcló en dosis iguales tenis de alto vuelo y el típico show que caracteriza a las exhibiciones.

Nadal venció a Djokovic en el partido exhibición en Buenos Aires

El súper campeón español Rafael Nadal sacó a relucir sus pergaminos que lo erigen como el mejor del planeta y le ganó al serbio Novak Djokovic, su escolta en el ranking mundial, por 6-4 y 7-5 un duelo que mezcló en dosis iguales tenis de alto vuelo y el típico show que caracteriza a las exhibiciones.

La cita fue presenciada por unas 12.000 personas que soportaron en forma estoica el calor agobiante que imperó en el escenario especialmente construido para la ocasión en el predio de La Rural, en el barrio de Palermo, y que cerró la gira de ambos tenistas por Sudamérica.

Nadal y Djokovic, un clásico del tenis moderno, se enfrentaron 39 veces en el circuito de la ATP, con ventaja de 22-17 para el español, aunque el serbio le había ganado los últimos dos partidos oficiales y la exhibición del miércoles último en Chile, en la velada que despidió del tenis al local Nicolás Massú y de la cual participó el cordobés David Nalbandian.

El número uno del mundo, nacido en Mallorca hace 27 años, venció al serbio en la final del US Open y luego perdió en las definiciones de Beijing y el Masters de Londres, respectivamente, y tras caer nuevamente en Santiago llegó a Buenos Aires con sed de revancha, pese a tratarse de una exhibición sin nada en juego, solo el orgullo deportivo.

Nadal, el preferido en el cariño de la gente y vitoreado desde que pisó el court, fue más intenso de entrada y por eso marcó claras diferencias con su derecha y un par de buenas devoluciones que le permitieron quebrar, adelantarse 2-1 y con esa ventaja dominar el desarrollo del set inicial.

El español, más serio y concentrado, jugó cada punto con la intención de mantener a la defensiva al serbio, quien se mostró extrañamente errático en el inicio del partido.

Nole se dio cuenta de que estaba en problemas y apeló a su talento nato, con cambios de ritmo y golpes sutiles, y así pudo contener a Nadal, que lo desbordaba con su potencia.

El serbio demostró que, además de ser un crack, es un showman genial, único en el mundo superprofesionalizado del tenis, y matizó la tarde con algunas ocurrencias que cautivaron al público.

En ese contexto, con el marcador 5-3 en contra, se divirtió con los hinchas y dirigió sus canciones con los brazos en alto, y también le sobró paño para reirese de si mismo, ya que luego de haber fallado un punto con una pelota que dejó en la red, simuló la repetición de la jugada en cámara lenta, ante el delirio de todo el estadio que lo aplaudió a rabiar.

El público, ávido por ver en vivo a los dos grandes cracks del momento, gozó con cada corajeada de Nadal y se divirtió con el serbio y sus ocurrencias, algunas geniales, como cuando imitó al español con todos sus tics incluídos, o ensayó distintos pasos de baile al ritmo de la música que resonaba en el estadio en cada descanso, antes de los cambios de lado.

Nadal cerró el set inicial por 6-4 y en el segundo logró otro quiebre que le permitió adelantarse 2-1 y luego estiró a 3-1, pero comenzó a fallar con su servicio y permitió la reacción de Djokovic.

El serbio le buscó bien el revés y lo desgastó hasta dejar el partido igualado en 4 con su primer quiebre de la tarde. En ese momento, el público se volcó en favor de Nadal y el gran “Rafa” no falló, ya que con un par de buenas derechas, muy precisas y sobre los flejes, desnudó errores en su rival y tras quebrarlo de nuevo (6-5) no vaciló con su sague y se llevó el set por 7-5, y la victoria final, que fue un premio a quien más la buscó.

El estadio entero aplaudió de pie a los dos cracks, y Buenos Aires tuvo el privilegio de albergar en una jornada única a los dos tenistas que dominan el circuito, que se profesan una gran rivalidad y prometen extenderla el año que viene, ya que es grandísima la diferencia que existe entre ellos dos y el resto.

Nadal y Djokovic son tan superiores que tienen asegurado que nadie los desplazará de esos dos puestos al menos hasta junio, por la gran ventaja de puntos que sacaron sobre el escocés Andy Murray, el español David Ferrer el tandilense Juan Martín Del Potro, lo que es un mérito grande para lo que representa hoy el tenis moderno.

Fuente: Diario La Capital (Rosario)

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Djokovic y Nadal posan ants de comenzar el partido.
Djokovic y Nadal posan ants de comenzar el partido.