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Lucas Emanuel Gómez (29) busca reencontrarse con su eje futbolístico, del que se salió cuando se fue del Motagua. El ex delantero de Independiente Rivadavia había marcado la friolera de 30 goles en dos temporadas (2014-2016) en el club hondureño, con el que fue campeón de la mano del DT Diego Vázquez. Después pasó por Alajuelense y Cartaginés (ambos de Costa Rica) y ahora desembarcó en el Deportivo Lara, de la primera división venezolana.
Gómez busca aportarle gol al Lara, con los motores que mueven sus impulsos, su esposa, Hazel, y sus hijos Lautaro, Thiago y Antonella.
"Lara es una ciudad bastante grande y muy transitada", dijo.
No se olvida del club del que es hincha. "A Independiente lo fui a ver hace más de un mes, cuando fui de vacaciones. Fuimos con toda la familia a la cancha. Ojalá que la Lepra se salve", señaló.
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-¿Cómo se dio tu pase al Lara?
-Hace seis meses habían hablado con mi representante y ahora que quedé libre preguntaron de nuevo y llegamos a un acuerdo.
-¿Por qué no te fue bien en Alajuelense y Cartaginés?
-En Alajuela (la ciudad) me costó mucho agarrar ritmo por las lesiones y jugué poco. En Cartago jugué más, pero la cuota de gol no fue tan alta.
-Llegás a un país que vive una gran crisis...
-Es cierto que hay inconvenientes, en la ciudad donde estoy es muy poco lo que se ve. Casi todos los problemas son en Caracas y en otras ciudades.
-Pero ese país no está bien...
-La gente siente que desde el gobierno las cosas no se están haciendo bien.
-¿Qué te aportó Diego Vázquez?
-Diego me aportó muchísimo, siempre confió en mí. Le voy a estar agradecido siempre por todo lo que viví en Motagua.
-¿Por qué dejaste ese club que sigue ganando títulos?
-Me fui porque quería jugar en un grande de Costa Rica. El fútbol es así, pero no me arrepiento. Sé que algún día volveré a Motagua.
-¿Qué esperás de tu futuro y qué objetivos tenés?
-Mi presente está ahora en Lara, quiero volver a ser protagonista, sentirme importante y agarrar confianza a base de goles. Quiero demostrar que puedo jugar a buen nivel.
-¿Volverás al país?
-Veo muy lejana la oportunidad de volver, pero el fútbol es impredecible. No cierro las puertas.
-¿Un recuerdo de tu infancia?
-Siempre para Navidad y Reyes me traían una pelota y un equipo de fútbol de River.
-¿En qué canchita jugabas?
-La cancha que recuerdo es la plaza del barrio Bolivia, que está enfrente de mi casa. Siempre que vuelvo juego un partido ahí con los pibes del barrio. La última vez que fui jugué con mis hijos ahí y fue muy especial para mí.