Dos semanas antes, el semblante era distinto: el Barcelona se quedaba con el derby español al vencer al Real Madrid y era todo alegría.
Pero este miércoles la posta fue distinta. Los jugadores del blaugrana llegaron a Barcelona con otros rostros. No era para menos.
La eliminación de la Champions League, ante el Atlético de Madrid, pegó duro en el equipo del Tata Martino y eso quedó demostrado en el rostro de los jugadores, sobre todo en el de Lionel Messi.
Fuente: Diario UNO Mendoza