La Fundación realizará este sábado un encuentro para homenajear a los sobrevivientes y las víctimas de la tragedia de los Andes.

La Fundación Rugby sin Fronteras y un tributo con mucha altura

Por UNO

Organizadores. Hernán Rojas, Juan Bautista Segonds, el intendente

malargüino, Juan Agulles, y Fernando Vela. Foto: Eduardo Araujo / Diario UNO.

Por Eduardo Araujo- El primer partido de rugby en plena cordillera, en homenaje a las víctimas y

sobrevivientes de la tragedia de los Andes (la que inspiró la película

Viven

) se jugará este sábado en Malargüe, Mendoza.

El encuentro es organizado por la Fundación Rugby sin Fronteras, que

entre otras actividades se dedica a realizar tributos en distintas partes del mundo, como el

recientemente concretado a Nelson Mandela en Sudáfrica o a los héroes de Malvinas, en las islas

australes.

A Malargüe arribaron Juan Bautista Segonds, Hernán Rojas y Fernando

Vela, integrantes de la Fundación, para esperar al resto de la delegación, compuesta por 43

personas que en las primeras horas de ayer iniciaron la expedición desde esta ciudad, para almorzar

al mediodía en Las Termas de El Sosneado, donde comenzaron una cabalgata, cruzando el río Atuel que

los llevó a Piedras Grande, sitio en el que acamparán y en el cual se disputará el encuentro.

"Estamos armando en el lugar donde está parte del fuselaje del avión

una cancha de rugby, a 3.000 metros de altura, para rendirle un tributo al equipo de rugby uruguayo

que demostró como ningún otro lo que es el espíritu de quienes practicamos este deporte", indicó

Segonds en su calidad de presidente de la entidad intermedia.

Además señaló que "queremos hacer este tributo porque, entre muchas de

las enseñanzas que nos dejó ese grupo de 45 rugbiers, podemos destacar el trabajo en equipo, la

solidaridad, el esfuerzo, el sacrificio, lo que es el amor y lo que es no tener fronteras para

honrar la vida".

Juan Ulloa, destacado montañista malargüino, colabora como guía de los

expedicionarios entre los que se encuentra Gustavo Zerbino, uno de los sobrevivientes de la

tragedia, quien está acompañado por su mujer, Coche Inciarte, presidente de la fundación Viven.

Tras el emblemático partido y un breve descanso continuarán la marcha

hacia el glaciar Las Lágrimas, a 3.700m, donde se encuentran otros restos del avión y la cruz que

se levanta para recordar a los uruguayos que perecieron en 1972 en el trágico accidente. Allí harán

un minuto de silencio, dejarán la pelota del partido y una placa recordatoria de esta actividad. Al

concluir la ceremonia, que seguramente será muy emotiva, se iniciará el descenso.

El Municipio local apoyó el desafío, formando parte del grupo el

intendente Juan Agulles, que comprometió su intervención en el juego.

Una fundación con principios

La fundación Rugby sin Fronteras defiende, difunde y predica la práctica de este deporte

formativo, sus valores y principios, colabora aportando a los clubes material que permita

desarrollar esos valores, apoyar los comienzos del rugby en lugares que no se encuentre

desarrollado este deporte para hacerlo cada día más popular y lograr crear conciencia en los

jóvenes de la importancia del deporte para la salud y para su crecimiento personal a través del

trabajo en equipo.

Del accidente

El accidente del Vuelo 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya ocurrió el 13 de octubre de 1972, cuando

el avión militar que conducía al equipo de rugby Old Christians se estrelló en la cordillera en

ruta hacia Santiago.

De las 45 personas en el avión, 29 murieron antes de ser rescatadas tras haber permanecido 72

días en la montaña de Malargüe. Este accidente fue conocido popularmente como el Milagro de los

Andes.