El piloto uruguayo Fernando Zuasnabar recorría a alta velocidad la pista del Rally boliviano cuando un perro callejero se cruzó en el camino.
Sin siquiera tener tiempo para verlo por estar saliendo de una curva muy pronunciada, el auto del piloto saltó producto de una irregularidad en el camino y lo pasó por arriba.
Pupi se salvó de milagro de ser atropellado e increblemente no sufrió ninguna herida, ya que el auto no llegó ni a rozarlo.