El fútbol argentino volvió a ser el escenario de un acto de violencia injustificable. En La Pampa, un hincha le vació un termo con agua hirviendo en la espalda a un jugador que celebraba un gol.
El despreciable accionar tuvo lugar en la final entre Sportivo Realicó y Pico FCF, por la Liga Pampeana. Un grupo de jugadores se había acercado al alambrado para festejar un gol cuando un hombre, quien luego fue identificado, les tiró agua hirviendo.
El que se llevó la peor parte fue Josué Miglia, de tan solo 15 años, quien tuvo quemaduras de primer y segundo grado. El agresor, por su parte, fue individualizado por otros hinchas y fue retirado por la Policía.