gran victoria ante Rusia, en Moscú, por la Copa Davis. Es cierto que el triunfo tuvo como eje alcordobés, pero el punto del dobles obtenido por Schwank y Zeballos fue clave, y el mismo Rey Daviddestacó que "para ganar la Davis se necesita un equipo".Pocas horas después, mientras la selección de básquetbol (la número 1 del ranking de la FIBA)estaba en nuestra provincia, vinieron de visita nada menos que Emanuel Ginóbili y Luis Scola, dosreferentes de la Generación Dorada y dos de los tres deportistas argentinos (el otro es Messi) quemás dinero ganan. Pero se sabe que Manu tiene la plata en el banco y no en la cabeza, por eso dejóconceptos muy interesantes como cuando dijo: "No hay que mentirse. La medalla dorada escircunstancial, porque Argentina no es basquetbolera. Todo se moviliza cada dos años, y porqueganamos. Nunca fuimos potencia. A nuestros deportistas todo les cuesta más, hay ínfima inversión yes difícil competir con Estados Unidos o Europa, donde hay otras estructuras. Debemos disfrutar loque tenemos y valorar los logros porque solemos enfrentar a gente con más posibilidades". Clarito.El sábado a la noche, el querido Cotón Reveco ratificó que es un campeón mundial con todaslas letras y un boxeador de esos que saben que su "secreto" es trabajar con humildad en elgimnasio.Para cerrar una semana prolífica en alegrías, las Leonas, con Pity D'Elía y Maca Rodríguez enel equipo, ganaron su tercer Champions Trophy venciendo en la final a Holanda, un país donde elhockey es superprofesional.Dio gusto ver a Luciana Aymar recibir casi avergonzada el premio de mejor jugadora por sentirque no había jugado bien. Y fue un placer escuchar al Chapa Retegui señalar una clave de lavigencia de Las Leonas en la elite: "Acá siempre se pone el nosotros antes que el yo".