Si grande fue la esperanza que generó verlo a Javier Chacón moverse con autoridad y aplicar un plan perfecto de pelea para lo que fue su segunda chance mundialista, más grande fue la decepción y el estupor que causó el desenlace de la pelea: se impuso el local, defendiendo así su corona gallo de la AMB, por nocaut técnico en el décimo round.
El mendocino en pleno ataque frenó sus acciones y se dio vuelta gesticulando que se iba, argumentando un fuerte dolor en el hombro derecho. Así acabó, en forma extraña, la ilusión del lasherino en Liverpool, ante el británico Jamie McDonnell.
Nada hizo acordar que Javier Chacón (53, 070) llegaba a esta pelea, avisado con una semana de anticipación, ya que el hermano de Pablo Chacón se plantó como dominador, y hasta el séptimo asalto dominó a McDonnell (igual peso), remontando una evidente diferencia de altura y alcance de brazos.
Javier mantuvo en retroceso al local, y lo castigó con combinaciones de curvos y ascendentes en corta distancia.
El defensor del título pocas veces llegó con sus disparos, no aprovechó la longitud para alejar con el jab a
Chacón, que también conjuraba los directos, haciendo cintura.
Pero a partir del séptimo, comenzó a llegar al rostro del mendocino con la derecha cruzada y combinando el cross con ascendente.
Sin embargo, el castigo no fue decisivo, por lo que sorprendió el abandono del Chispita Chacón.
Fuente: Diario UNO Mendoza