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Matías Minich fue el gran artífice de la victoria de Gutiérrez ante Pacífico. El delantero hacía 5 partidos que no lograba mojar.

El 9, la mano de una bruja y un hat-trick inolvidable

Por UNO

Cinco partidos tuvo que esperar Matías Minich para volver a festejar, y a lo grande. Y lo hizo nada más ni nada menos que con un triplete en la victoria de Gutiérrez (3-0) ante Pacífico de General Alvear, en un partido por la zona 5 del Argentino B.

¿Debió llevarse la pelota? Sí. Sin dudas la merecía, porque si el 9 convierte, Gutiérrez vence. De hecho, aquel partido de la 9ª fecha que ganó el Perro ante Atlético San Martín fue el último triunfo y en el último en el que el delantero convirtió.

Pero, según contó el atacante, hubo una ayudita extra. “Quiero compartir este día tan lindo con mi mujer y con mis hijos, que siempre me acompañan, y con una brujita que me dio una manito”, dijo el goleador del Celeste.

El delantero destacó la importancia del triunfo del sábado. “Necesitábamos mucho un triunfo así. Se me abrió el arco justo a tiempo, en un partido trascendental para conseguir clasificar”, aclaró.

“Se vio un equipo maduro nuevamente que cuando tuvo que jugar, jugó, y cuando tuvo que meter, metió. Es importantísimo que esto se dé en este momento. Lo bueno es que ganamos”, dijo.