Por Érica Mariana Ló[email protected]
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Buena campaña del equipo de la Sexta. Cumplió su objetivo de clasificar y pasar de fase, en un torneo largo y con muchos competidores.
El Torneo Federal es una de las categorías más exigentes del básquet argentino. No es la de más alto nivel (lo es la Liga Nacional), pero el hecho de que más de 50 equipos de todo el país compitan por un solo ascenso directo y otro revalidando da la pauta de lo dura que es.
Rivadavia es el único equipo mendocino que sigue en carrera y habiendo hecho una excelente campaña comienza a jugar este viernes los cuartos de final de la Región Sur ante el número uno del certamen: Estudiantes de Olavarría.
Quien también estuvo cerca de acceder a cuartos de final fue Anzorena, que cayó con hidalguía el domingo pasado ante Ferrocarril Oeste.
Los de la Sexta Sección lograron más esta temporada que haber clasificado en su conferencia y haber estado cerca de pasar de fase. Lograron la consolidación de grupo, que otros años faltó. También hubo desarrollo propio. Nicolás Aguilera, un colorado que se crió y creció en el patio del club, se transformó en el base que siempre los Rojos quisieron tener, y se lució en la categoría.
Aguilera y el incansable y siempre rendidor Jorge Hacha Sánchez fueron la cabeza de un equipo donde sobresalieron el goleo de Ignacio Revellino y la chispa que le imprimía Alejo Schestakow a las ofensivas.
Otro punto a favor fue el crecimiento de los más jóvenes, donde el DT Sebastían Figueredo apostó a Juan Luca Hernáez, Pablo Furlanetto y Mariano Solé, para hacer buenos relevos de los mayores... Y los pibes cumplieron.
Lo que le faltó a este grupo, y aún no se pueden definir bien las razones de ello, fue regularidad y concentración en los momentos decisivos, sobre todo en los cierres de cuartos. En este punto Anzorena perdió mucha energía y chances, porque tras el receso de fin de año cayó en muchas desatenciones que le valieron derrotas muy costosas y dolorosas.
Ahora es momento de descansar, y merecidamente, porque hicieron un buen torneo. Y luego a pensar cómo armar el equipo para afrontar una nueva temporada. En principio, los jugadores de Mendoza quedarían, al igual que Masieri que tiene un contrato. El resto está por definirse.
Seguramente será hora de pensar en que Anzorena necesita un pivot neto, una posición que siempre faltó en el equipo de la Sexta desde su participación nacional. Porque esta vez el Hacha Sánchez se lució peleando abajo ante hombres más altos que él, pero sintió la falta de un grandote en distintas ocasiones. En el Torneo Federal tener un buen pivot es casi garantía de triunfos.
