La historia de la gimnasta Florica Leonida es digna de una película, ya que la joven promesa rumana, multicampeona, cambió de profesión, engañando a su familia, para radicarse en Alemania y ejercer el "oficio más antiguo".

De gimnasta campeona en Rumania a prostituta de lujo en Berlín

Por UNO

Florica Leonida fue una gran promesa deportiva: cuatro veces medallista en el Mundial Junior de 2002, medalla de plata en el Mundial de 2003, y en el campeonato Europeo de 2006. Pero el presente la encuentra parada en un contexto muy distinto al de los gimnasios y estadios depoertivos: ahora se dedica a la prostitución de lujo.

Según ha recogido el diario alemán «Bild», la rumana lleva ofreciendo sus servicios sexuales en Berlín desde que dejó la gimnasia profesional en 2007 y decidió emigrar a Alemania en busca de una vida mejor. Las deudas y la necesidad de dinero le impulsaron a tomar ese camino.

La historia salió a la luz cuando un conocido suyo encontró su foto en un catálogo donde se describía como un «un parque de atracciones sexuales».