Omar [email protected]
El lado B del DT del Tomba. Tras el gran triunfo ante River, Jorge Almirón se atrevió a un mano a mano donde contó detalles de su vida como jugador y dio sus referentes en la profesión.
El lado B del DT del Tomba. Tras el gran triunfo ante River, Jorge Almirón se atrevió a un mano a mano donde contó detalles de su vida como jugador y dio sus referentes en la profesión.
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Tiene un perfil bajo Jorge Almirón, técnico de Godoy Cruz, en los entrenamientos. Se lo ve como un tipo serio, muy metido y detallista en su trabajo. Ayer a la mañana tuvo un mano a mano con Ovación en el Gambarte, tras el resonante triunfo ante River en el Monumental.
Se dejó conocer a fondo. Habló de su vida y de su etapa como jugador. Trata de imprimirles a sus equipos, como característica, el juego bonito y a su estilo no lo cambia, a pesar de que con el Tomba se juega la permanencia en primera división.
Vivió mucho tiempo en México. Cuando era chico fue carpintero. Comenzó como delantero, pero terminó jugando de 5. Una historia interesante tiene el DT de Godoy Cruz.
-¿Cómo fue tu vida desde chico?-Fue normal, como cualquier chico, con mis padres y mis dos hermanas. Soy el más grande de una familia muy trabajadora. Después de terminar la primaria y la secundaria me dediqué a trabajar un tiempo. Lo hice desde los 14 hasta los 17. Tuve la posibilidad de jugar en San Miguel, el equipo donde debuté. Mi carrera de jugador fue rara, porque no hice inferiores.
-¿Y de qué trabajabas?-Estuve en varios lugares. Estudiaba y tenía que trabajar. Fui a San Miguel a prueba por cuatro meses y me desmotivó porque no se entrenaban seriamente, los técnicos faltaban, y me dediqué a trabajar. Fui pulidor en una fábrica de bronce y trabajé de carpintero con un tío, hice de todo.
-¿Cómo se inició tu carrera de jugador?-Me acuerdo que en la fábrica de pulido de bronce mi patrón tenía un equipo de fútbol, me vio jugar y me llevó a Chacarita. Me iban a registrar, pero como ya estaba fichado en San Miguel fui a buscar el pase. Pero ahí me vieron de nuevo, me dijeron que me quedara y en cuatro meses debuté.
-Creciste en San Miguel...-Sí, ahí nací. Tengo mis amigos y cuando puedo los visito. Hoy el club está muy mal y en la última categoría. Cuando jugaba, había grandes equipos y una sola categoría. Me acuerdo que me tocó jugar con Chicago, Quilmes, Morón, Tigre y Banfield. Eran rivales duros.
-¿De qué jugabas?-En San Miguel fui delantero, en Español jugaba de volante y después Ricardo Lavolpe me llevó a México y me puso de volante de contención, jugué como 5 clásico y terminé haciéndolo en esa posición hasta el fin de mi carrera.
-¿Y cómo siguió la carrera como jugador?-A los 21 me fui al Wanderers de Chile, estuve dos años y ascendimos a primera. Me volví a la Argentina y jugué en Español, en primera. Lo hice ocho meses, en el ’94, y al otro año me fui para México. Estuve en varios equipos, como Atlas, Morelia, León, Querétaro y Dorados, y a los 37 años me retiré.
-Cuándo te estabas por retirar ¿pensabas en ser técnico?-Me cuidaba mucho como jugador. Lo tuve a Lavolpe y empecé a ver muchas variantes tácticas. Jugando de 5 se ve la cancha de otra manera. Y terminé siendo capitán de varios equipos.
-¿Es tu referente Lavolpe?-Él fue muy importante en mi carrera, principalmente en lo táctico, en los movimientos, en el fútbol ofensivo. Tuve muchos entrenadores que me enseñaron muchas cosas. Lavolpe me abrió la cabeza en ese sentido y hoy estoy sacando provecho de sus enseñanzas.
-¿Cómo tomaste que te comparen con Simeone?-No (risas) , él es un grande, fue un histórico como jugador y tengo una gran admiración por él. A mí en la Argentina no me conoce nadie.
“En mi casa trato de desconectarme y dedicarle tiempo a la familia”
Jorge Almirón llegó a Mendoza después de dirigir en varios equipos de México y sin tener experiencia en la primera división del fútbol argentino, aunque sí en Defensa y Justicia, en el ascenso, donde hizo una buena campaña.
Su familia“Estoy viviendo con mi señora, que es mexicana. Tengo tres hijos que están estudiando. Como toda mujer, me apoya como si trabajara en una fábrica. La pareja es importante para cualquier hombre. Hace diez años que estamos juntos y ahora están conmigo en Mendoza”.
Sus gustos“Salí poco con la familia. Fui al cine. Y me gustan mucho el asado y las pastas. Me gusta salir cuando las cosas están bien. Cuando las cosas están mal prefiero no salir, porque la gente puede pensar mal. En los tiempos libres me gusta quedarme en casa y disfrutar de la familia”.