Pistorius mató a la modelo, diplomada en Derecho, al dispararle cuatro veces a través de la puerta del baño tras gritarle "¡Lárgate de mi casa!".
El atleta paralímpico, que tiene amputadas las dos piernas, no niega estos hechos. La única pregunta es por qué lo hizo.
El acusado asegura que creyó disparar a un ladrón mientras su novia se hallaba en la cama.
La fiscalía asegura que la mató en un arrebato de ira tras una discusión.
La personalidad de Pistorius, que se hizo famoso cuando compitió con sus prótesis en los Juegos Olímpicos de Londres, suscitó gran interés durante el juicio.
La acusación lo describió como un mentiroso egoísta obsesionado con las pistolas, los autos deportivos y las mujeres guapas, incapaz de asumir la responsabilidad de sus actos.
La defensa aseguró que hay "dos Oscars": un atleta de alto nivel y un individuo muy vulnerable con una discapacidad que actuó por miedo y no por ira cuando disparó las cuatro balas.
Durante el juicio, se tomó nota de los testimonios de casi 40 personas, incluidos los vecinos que aseguraron haber oído gritos y disparos, y expertos citados por la defensa que afirmaron que esto es imposible.
La juez Thokozile Masipa desempeña un rol central en este juicio seguido en directo por cadenas de televisión internacionales, así como el fiscal Gerrie Nel y el abogado defensor Barry Roux.
Completan el "reparto" la hermana de Pistorius, siempre presente detrás del banquillo de los acusados, y la madre de la modelo de 29 años.
La mayoría de los telespectadores en el mundo parecen haber decidido ya si Pistorius es culpable o inocente, como ocurrió durante el juicio televisado de la estrella de fútbol americano OJ Simpson, acusado de asesinar a su esposa hace 20 años.
Pero a diferencia de ese proceso, en el que Simpson fue absuelto por un jurado, en el de Pistorius la opinión de la juez Masipa, apoyada sólo por dos asesores, es la única que cuenta.
Si decide que Pistorius mató deliberadamente a Steenkamp, éste podría ser condenado a cadena perpetua, lo que en Sudáfrica significa 25 años de cárcel.
Pero aunque éste sea el veredicto, no será el final del caso. Se presentarán argumentos antes de que se publique la eventual condena y seguramente habrá apelación.
Si Pistorius es declarado inocente del cargo de asesinato, podría ser condenado por homicidio y sentenciado a una pena de cárcel.
Independientemente de lo que suceda, su brillante carrera de atleta parece haber llegado a su fin.
El que fuera antes un chico de póster para el deporte de discapacitados, se ha retirado de todas las competiciones y ha visto cómo las grandes marcas le anulaban todos sus contratos.