Si la primera jornada de juicio por la muerte de Alan Villouta (21) fue un punto a favor para el empresario acusado, Alejandro Verdenelli (46), este miércoles se puede interpretar como una rápida contraofensiva de la parte acusatoria.
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Cuatro miembros de Policía Científica desfilaron en el segundo día del debate. Todos intervinieron en pericias que se realizaron en el lugar del hecho -en la noche del hecho y días después- y en la camioneta Porsche Cayenne.
Las conclusiones contradijeron a los dos peritos del primer día. El policía Gustavo Micha indicó que en la zona había tachos que indicaban reducción de velocidad, que la iluminación era buena y que Verdenelli circulaba a más de 80 kilómetros por hora.
"No se puede calcular el número preciso, pero según mi experiencia los indicios indican que circulaba a exceso de velocidad", concluyó.
Con la declaración de otro perito de Científica, Marcelo Rosales, se sumaron unas fotos tomadas dos días después de la tragedia donde se demostró que antes del momento de impacto había carteles que ponían como límite de velocidad 40 kilómetros por hora -debido a las obras que se realizaban por ese entonces-.
Todo esto se contradice con los dos peritos mecánicos que este lunes indicaron que ese cartel estaba 60 metros más adelante del lugar del accidente y que la velocidad de la camioneta era entre 60 y 75 kilómetros por hora.
Lo cierto es que este miércoles finalizó la etapa testimonial y ahora continuarán los alegatos, donde cada parte sugerirá una pena al Tribunal. Luego será el turno de los jueces, Aníbal Crivelli, Ariel Spektor y Marcelo Gutiérrez del Barrio quienes definan la cuestión.
El hecho
Alan Villouta murió al ser atropellado la noche del 26 de agosto de 2017 en el Acceso Sur, a la altura de La Barraca Mall por la camioneta de alta gama que conducía Verdenelli, quien se dio a la fuga y horas después regresó al lugar del accidente. El empresario de 44 años se presentó ante el fiscal de Homicidios Carlos Torres 72 horas después de ocurrido el hecho
