La ex presidenta Cristina Fernández partió en el vuelo 1893 de Aerolíneas Argentinas a las 19.25 y llegó a Buenos Aires poco antes de las 22. Un rato antes de emprender el viaje desde El Calafate un centenar de manifestantes la despidió en el aeropuerto tras acompañarla en una caravana de vehículos.
Al llegar a Aeroparque la ex mandataria fue recibida por un nutrido grupo de manifestantes de La Cámpora. Cristina recorrió el vallado rodeada por 20 custodios policiales y se detuvo a saludar a varios militantes.
Desde allí, partió rumbo a su domicilio porteño ubicado en la intersección de las calles Juncal y Uruguay, de Capital Federal.
Cristina Fernández de Kirchner deberá comparecer el próximo miércoles ante el juez Bonadio, en el tramo final de indagatorias en las que ya declararon funcionarios del BCRA, entre ellos su ex titular Alejandro Vanoli, y en la que declarará mañana el ex ministro de Economía Axel Kicillof.
Salida desde el Calafate
Cristina dejó su casa de El Calafate a las 18.10 en medio de un férreo operativo de seguridad que se sumó a un improvisado "cerco" montado por militantes y vecinos, que provocó algunos incidentes con la prensa.
Vestida con remera blanca, un chal y sin sus habituales anteojos oscuros, la ex mandataria -visiblemente emocionada- saludó a los manifestantes desde el vehículo, un Renault Megane color champagne, y junto a la comitiva partió a paso lento entre la gente escoltada por dos Ford Ranger que componen la custodia.
Los vehículos transitaron los 22 kilómetros desde la ciudad al aeropuerto acompañados por una caravana, mientras en la entrada se hallaba otro centenar de manifestantes para brindarle una despedida.
Allí también se llevó a cabo un fuerte operativo de seguridad, mientras que la ex presidenta, a poco de abordar el vuelo, se asomó desde el primer piso del aeropuerto y saludó a sus seguidores a través del vidrio.
