El país pionero en América fue Uruguay, pero ahora ya hay otra nación -Canadá- que ha legalizado la marihuana para uso recreativo. Estados Unidos la permite por ley sólo en ocho de sus Estados.
Los canadienses afines a esta idea la celebraron ayer formando largas colas de clientes ansiosos por comprar cannabis en las principales ciudades de su país.
Falta ver cómo reaccionará el mercado, que en un primer momento mira todo con cautela.
De los 36 millones de canadienses, 4,9 millones son consumidores, más o menos habituales, de marihuana.
El impacto de Uruguay fue, en su momento, más bien simbólico, ya que este país sudamericano tiene una población de 3,5 millones de personas.
A diferencia de Canadá, Uruguay vende esta droga en farmacias. Las ventas han sido de unos 35 millones de dólares este año, frente a los 3.300 millones de ventas ilegales del año pasado en Canadá.
La pertenencia al G-7, a la OCDE y su tratado renovado de libre comercio con Estados Unidos da a la decisión un peso que la iniciativa uruguaya no tuvo. Pese a ello, es el país de Donald Trump el que alberga más población que puede comprar cannabis legalmente y sin indicación médica en ocho Estados.
Todos los indicios marcan que el próximo país que se animará a dar el mismo paso es México, donde ya está validada para uso terapéutico y donde el narcotráfico ha provocado una especie de estado paralelo.
En Canadá, una encuesta nacional publicada ayer indica que el 70% de sus habitantes apoya esta legalización.
Sin embargo, siguen presentándose debates muy extendidos. Es que -coinciden varios organismos médicos- la marihuana no es un elemento inocuo para el organismo.
Pero tampoco lo son el alcohol y los cigarrillos. Siempre la prohibición ha sido peor, aseguran varios estudiosos de estos temas.
Por lo pronto, Canadá ya estudia elevar a 21 años -desde los 18 actuales- la edad para poder comprar cannabis en negocios autorizados.
En la Argentina, en tanto, los gobiernos aún no pueden -o no quieren- hacer efectiva una ley de educación sexual que tiene más de 12 años.