Al menos 15 personas, en su mayoría turistas búlgaros, murieron ayer cuando el barco donde
viajaban zozobró en el lago Ohrid de Macedonia.
Según la policía, a bordo viajaban 55 pasajeros y tres tripulantes.
Sin embargo, la nave sólo tenía permiso para transportar 43 pasajeros,
indicaron funcionarios en la ciudad capital, Skopje.
Varios testigos aseguraron que el barco se partió en dos y se hundió en
sólo un minuto, a unos 300 metros de la costa.
Sobre la cifra de fallecidos hubo reportes contradictorios. Inicialmente
se habló de 17 y luego de 22 muertos. Anoche, el canal local A1 TV informó que el Ministerio del
Interior cifró oficialmente en 15 las víctimas.
Los primeros en ir en auxilio de los pasajeros fueron los visitantes de
un camping a orillas del lago. Poco después llegaron botes policiales con buzos al lugar del
accidente. Tres búlgaros resultaron gravemente heridos.
Se estima que la sobrecarga del barco fue la causa del accidente. La
nave pertenecía a un empresario macedonio, es de fabricación alemana y data de 1924.
El barco había sido revisad hace pocos meses.
El ministro de Transporte macedonio, Mile Janakievski, renunció al cargo
tras el siniestro por “razones morales”.
El gobierno búlgaro enviará un avión a la zona para permitir el regreso
de sus víctimas y supervivientes al país, según se precisó.
El lago Ohrid es uno de los mayores espejos de agua de los Balcanes y
está entre los más antiguos de la Tierra. La mayor parte pertenece a Macedonia y otra menor a
Albania. Fue declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco en 1980. (DPA)