El ministro de Trabajo de la provincia de Santa Fe, Carlos Rodríguez, realizó un
balance de su gestión al frente de la cartera laboral. En un desayuno que compartió con periodistas
de varios medios de comunicación de la ciudad capital, el funcionario reconoció que la tarea de
cualquier área como la suya es "estar cerca de la gente".
Para lograr ese objetivo es que "decidimos decirles a los
empresarios y a los trabajadores cuáles eran las herramientas que teníamos para enfrentar la
crisis; es decir estar siempre en la cresta de la ola y no debajo". De este modo estimó que ese
manejo de la situación "ha dado sus réditos, aunque no todos los que quisiéramos".
La quema. A modo de ejemplo mencionó que le hubiera gustado "resolver el problema
de General Motors pero tampoco la Nación pudo hacerlo hasta ahora". Igualmente rescató que "la
crisis o el desempleo no depende de los ministerios de Trabajo" ya que "quien fabrica o quema
empleos es la economía y es ahí donde el país necesita una serie de reformas que pareciera que no
se atreve a hacer".
Como ejemplo, mencionó que una de las prioridades debería
ser "solucionar de una vez por todas el problema del campo". En ese marco afirmó que "las
respuestas dadas ayer por la presidenta son inconsultas" porque no se discutieron "ni con las
provincias ni con la Mesa de Enlace" y aseveró que "esa es la forma de gobierno que nosotros no
queremos implementar en la provincia".
Para el ministro "una política que se gesta detrás del
escritorio y no está sobre la gente no tiene porvenir". De esta manera rescató que la provincia de
Santa Fe "es agroindustrial, fundamentalmente, y como tal hay que tomar medidas: en el agro estamos
sosteniendo la eliminación de las retenciones; en el sector industrial, en cuanto a maquinaria
agrícola, tiene deudas muy importantes; lo que hay que tener en claro es que nuestra defensa de los
puestos de trabajo con uñas y dientes va de la mano de defender a los trabajadores".
Finalmente, y en cuanto al 2009, Rodríguez no se mostró muy
optimista: "Las expectativas no son buenas". Si bien confirmó que "tenemos bajo control la mayoría
de los conflictos que hay" no ocultó que "también hay una buena cantidad de expedientes de Procesos
Preventivos de Crisis que van en aumento".