El país sudafricano padece desde la segunda mitad de año una incontrolable epidemia
de cólera, producto de las pésimas condiciones sanitarias. En la imagen, chicos recogen agua
contaminada en Harare, capital del país que desde 1980 domina el dictador Robert Mugabe. El ex
guerrillero podría tener sus días contados. Al aislamiento internacional suma los primeros signos
de rebelión en su temido aparato represivo. Ayer, el gobierno de Kenia pidió abiertamente a las
fuerzas de seguridad de Zimbabwe que lo derroquen.