situación y de los porqués de las decisiones."Acá muchos se lavaron las manos y quieren dejar mal a la dirigencia. La Municipalidad deMaipú había prometido dinero para apoyar al club y de un día para el otro nos dijeron que no iban aseguir porque no tenían plata. Además eso arrastra al Casino de Mendoza, porque son los mismospolíticos los que están detrás. Y como no quieren que me postule para la intendencia, deciden hacertodo esto. Entonces nosotros nos quedamos mal parados y viendo como hacer para salir adelante",dijo Sperdutti."A mí cuando me fueron a buscar Juan Torres y el antiguo presidente nunca me dijeron queestaba rematado el club. Yo me enteré cuando me hice cargo y en vez de tirar todo a la basura,decidí tratar de arreglar todo. Además la dirigencia anterior les había dado el pase a todos losjugadores de inferiores, por lo que yo me encontré sin nada. En seis años ascendimos de categoríados veces y hoy tenemos un equipo de 150 mil pesos. Lamenteblemente (Juan) Torres tuvo quedesvincular a algunos jugadores, pero es de la única manera que se puede seguir afrontando gastos",agregó."Y otra cosa de la que estoy cansado es de la hipocresía entre jugadores. Leonardo Torresestaba negociando con Racing de Córdoba cuando ya tenía todo arreglado con nosotros.Hay futbolistasque ya tienen todo el torneo pagado y nadie se solidariza con nadie", remató Omar Sperdutti,haciendo alusión a que las bajas se podrían haber evitado si el plantel estaba de acuerdo."Quiero terminar diciendo que si alguien a quien amo es al hincha de Maipú. Pero a ese deltablón que paga la entrada. Una vez le dije pecho frío, pero era al plateísta que habla sin sabernada", relató un efusivo Omar Sperdutti.