Después del partido, incidentes entre jugadores de San Martín y Paz Juniors

visitantes.

Manotazos e inclusive una acción repudiante de Dal Poggetto, que le pegó al masajista chacarerosólo separaba.

Las picudeadas propias del partido terminaron en una revuelta excedió los límites del campo dejuego y pasó a la zona de camarines hasta terminar con los gases lacrimógenos lanzados por la

policía.

Una vez finalizados los incidentes, Alfrredo Ramírez Silva dijo: "Esto viene desde el añopasado, el partido en el que le ganamos tres a uno, hice el tercero y el grandote el N°2, Dal

Poggetto se llama, me robó la vincha, se la fui a pedir al camarín y me pegó una cachetada".

"Después fuimos allá y siguió la rosca. Ahora me cargaba con la vincha y Carnero me gastaba conque habían clasificado y me decía que hablás si sos suplente", siguió.

"Yo le conteste: 'dejá de robar viejo mirá las várices que tenés' y no le gustó mucho. Son cosasdel fútbol, así lo tomé, y ellos no se aguantaron la derrota".

Por el otro lado, Cristian Carnero manifestaba: "La verdad que el partido estaba tranquilo, nopasaba nada, pero ese pibe Ramirez Silva, es un creído. No jugó en ningún lado y me faltó el

respeto. El picudeo es normal, pero la falta de respeto no está en los códigos. Yo le deseo la

mejor suerte a San Martín y que clasifiquen porque es uno de los mejores equipos" .

Diego Dal Poggetto agregó a lo dicho por Carnero que "se puede hablar y decir mucho durante elpartido, pero las gastadas una vez que terminó y ganaste no está bien, así no son los códigos del

fútbol. Lamentablemente ese pibe (en referencia a Ramirez Silva) tiene mucho por aprender".