Manuel de PazColumnista de UNO
Bodas gay en la cárcel. Travestis que reciben su nuevo DNI en la Casa de Gobierno. Conservadores que mutan en nac y pop. Y el Alberto que avanza.
Bodas gay en la cárcel. Travestis que reciben su nuevo DNI en la Casa de Gobierno. Conservadores que mutan en nac y pop. Y el Alberto que avanza.
Manuel de PazColumnista de UNO
Esta provincia supuestamente aburrida insiste en sorprendernos. Veamos, si no, ese casamiento de varones presos en la cárcel, quienes fueron retratados mientras daban el sí ante la oficial del Registro Civil, y a una enternecedora suegra que asistió a avalar la boda.
O repasemos esa ceremonia en la propia Casa de Gobierno donde el más famoso travesti de Mendoza, La Turca Glamour, recibió de manos del ministro de Gobierno, Félix González, un flamante DNI que le acredita su nombre y condición de mujer. O, dicho de otro modo, que le respeta su sexualidad psicológica más allá de su naturaleza física.
Ex “gorilas”
Esta provincia tan “conserva” nos mostró también por estas horas cómo se puede mutar con alegre frescura del (también supuestamente) rancio Partido Demócrata hacia las filas nacionales y populares del justicialismo encandilados por Cristina.El ejemplo lo dio Marisa Garnica, la vistosa esposa del (también ex ganso) intendente de Luján de Cuyo, Omar Parisi, comuna en la que dicha señora ha cumplido con expectantes cargos políticos al punto que muchos la llaman “la intendenta”.
Con Marita y Anabel
A la compañera Marisa la vimos ayer ganar la calle, junto a otras esclarecidas mujeres del justicialismo local, como Marita Perceval, Anabel Fernández Sagasti y Angélica Escayola, para vivar hasta quedar roncas a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.Estas mujeres no se privaron de seguir el libreto de la Rosada, y ayer enfilaron su marcha y sus duras consignas hacia la corresponsalía local del diario Clarín, algo que aquí sonó bastante forzado. Mendoza no es Buenos Aires.
Ex cuestionadoras
En esa marcha también llamó la atención la presencia de la ahora justicialista Alejandra Naman, quien durante años fue referente local de Lilita Carrió, es decir de una de las adalides del antikirchnerismo.Namam no debería olvidar cómo les suele ir en la estructura K a las/los que viniendo de esos terrenos cuestionadores se les da por acercarse al calor del oficialismo con el ánimo de hacer un aporte crítico: se queman.
La historia de Graciela Ocaña es altamente aleccionadora al respecto.
El vecino de otro país
Esta provincia que en teoría no genera grandes sobresaltos amenaza, sin embargo, con darle aquí una muy buena elección al puntano Adolfo Rodríguez Saá en las primarias del 14.En esos comicios, el gobernador puntano pretende quedar fijado como el postulante presidencial del peronismo federal, es decir, de un sector de los justicialistas disidentes con el kirchnerismo.
El estilo “del Alberto” nada tiene que ver, en apariencia, con la forma de entender la política de los mendocinos. Sin embargo, la marca Rodríguez Saá ya hizo aquí una muy buena elección en la época del “que se vayan todos”.
De perrosEsta provincia pelmaza y bostezadora nos tiene, empero, a los saltos con la cantidad de jaurías caninas que han invadido calles, plazas y parques.
El fundamentalismo pro perrero, ese que logró que mediante una ley se eliminaran las perreras en los municipios provinciales, permitiendo sólo la esterilización (se cumple en muy pocas comunas), ha hecho que los perros abandonados por dueños poco responsables anden por las zonas céntricas a la búsqueda de comida y contención, y provocándoles en realidad numerosas molestias y peligros a los peatones.
La culpa no es del Boby
Desde el parque General San Martín a las calles de Luján, el problema de los perros ya ha pasado de castaño a oscuro, ya que todos los días vemos a motociclistas que ruedan en el asfalto por el accionar de estas jaurías. O a pasajeros que en las paradas de micros son amedrentados o mordidos por estos bichos, que, claro, no tienen la culpa de una desidia de aquellos humanos que no cumplen con sus obligaciones políticas.Esas formas
En esta Mendoza aburrida y donde, dicen, se guardan demasiado las formas hay sin embargo un bienvenido temor de que se cajonee el caso de la jueza Fabiana Martinelli. Hablamos de la magistrada que atropelló a tres jóvenes tras beber alcohol y que huyó, lo que obligó a que la policía debiera salir en su búsqueda.Para los atropellados y para no pocos observadores de este caso, se podrían estar dilatando demasiado los trámites que deberían llevar a la jueza Martinelli ante el Jury de Enjuiciamiento.
Los pro mineros
En esta Mendoza donde el tema de la defensa del ambiente tiene defensores muy militantes y activos, llamó por estos días la atención la marcha que concretó un grupo de vecinos de Uspallata que bajó a la ciudad para plantear otra visión: la de quienes buscan puestos de trabajo en ese rubro.“A éstos los movilizó San Jorge”, fue lo primero que dijeron los antiminería.
50 y 50
Este diario, rememoré, envió el año pasado a un periodista a que recorriera Uspallata y a que hablara con todos los actores, a favor y en contra del proyecto San Jorge.Nuestro enviado ratificó que se trata de un plan que –para bien o para mal– cambiará la fisonomía de Uspallata.
Y la conclusión a la que llegó aquel periodista fue que la sociedad de Uspallata estaba partida en dos y que había tantos partidarios de la minería como detractores.
Un contrato social
Por eso, el gran desafío de la clase política es entonces que la minería trabaje para bien. Sumando incluso a los más críticos a algunas de las instancias de los controles.Y para eso se debería tender a establecer una política de Estado en la que los principales partidos políticos se comprometan a cumplir (gobierne quien gobierne) con un control estricto, a fin de que se pueda generar riqueza sin dañar el ambiente.
Si ha habido antecedentes de permisividad y daños en otras provincias del país, eso nos debe servir para que aquí evitemos esos males con inteligencia.
Y una de las formas es aunando el interés social con la generación de miles de puestos de trabajo, siguiendo el ejemplo de países que han logrado llegar a un beneficioso punto medio.
La minería es uno de esos asuntos que les mete miedo a los políticos.
Un miedo paralizante que a veces no lo vemos ante la miseria, la pobreza, la exclusión o la corrupción.
Un miedo que podría diluirse si logramos hacer ese contrato social que nos obligue, con reglas claras, a ser, también en este asunto, una provincia con signo distintivo. Supuestamente aburrida. Pero con clara capacidad de dar buenas sorpresas.