Hola, mi nombre es Iván, tengo 23 años. Estoy de novio desde hace casi cinco años y siento que ya no es lo mismo. Sentimentalmente sí lo es, pero cada vez que tengo la oportunidad de intimar con mi pareja siento que ahora el que pone excusas soy yo. Siento las ganas, de eso no hay dudas, y cuando miro a mi pareja siento que me gusta también, pero ya no siento ese deseo, esas ganas de hacer locuras para tener sexo. Tuvimos un hijo hace seis meses ya y estamos bien como familia, juntos y felices, pero creo que eso es lo que me ha frenado el impulso sexual hacia ella, ver tantas cosas en el momento posparto al igual que cuando estaba embarazada me hicieron sentir un poco de impresión. No quiero detallar mucho. Cuando veo otras mujeres por la calle siento esa atracción que sentía por mi pareja antes del embarazo. Yo a ella la quiero demasiado y estoy seguro de que en el momento de consumar el acto sexual voy a tener ganas, refiriéndome con esto a que el problema mío es que nunca la busco, siento que no me atrae como antes (aclaro que ella quedó muy bien luego del embarazo, no ha engordado nada y todo el mundo le pregunta cómo ha hecho para recuperar la figura que tiene). Anhelo solucionar mi problema porque mi intención no es, ni lo fue nunca, buscar por otro lado. Sé muy bien las graves consecuencias que trae, y jamás les haría eso a mi pareja y a mi hijo. Desde ya, muchas gracias.
El lector que hoy nos consulta explica que la mujer con la que ha tenido un hijo ya no le resulta tan atractiva sexualmente como antes. Duda entre buscar el placer fuera de la relación o insistir con ella.