País

Sólo cuatro de cada diez argentinos económicamente activos ahorraron alguna vez en dólares.

Para el 60% de los argentinos

Por UNO

Por Nacho Rodriguez@NachoRodriguezJ

Es notable la pasión que los argentinos tenemos por el dólar. Es impresionante lo que somos capaces de hacer para conseguir uno. Pero muy pocos tienen la chance de ahorrar en dólares, de guardarlos. Aunque parezca todo lo contrario. Los tres primeros deciles (en estadística cada decil es un décimo de la población) de menores ingresos de la Argentina jamás vieron un dólar. En tanto, el cuarto, el quinto y el sexto decil quizá vieron un dólar pero difícilmente pudieron ahorrarlo.

Sin embargo los medios de comunicación parecen contagiados del mismo virus verde. Todos, sin excepción: diarios, revistas, radios, televisión hablan sólo de dólares, una moneda que nos queda a diez mil kilómetros. La fiebre es contagiosa y hasta quienes jamás comprarán dólares para ahorrar terminan saliendo de su casa pensando en dólares.

Una inmensa mayoría de los diarios nacionales despliegan en su tapa de manera exclusiva y cada mañana el tema del dólar. En algunos tratamientos periodísticos, varios comunicadores parecieran estar reportando una peste que se va a llevar puesta a toda la sociedad. En las redacciones de canales, radios y diarios hay una preocupación y una de caras largas que no se puede creer.

Quizá una porción importante de comunicadores sociales de los que cuentan cada día ‘las cosas que pasan en el país’ en los distintos grandes medios de la Argentina pueden ahorrar en dólares y justamente parecieran pretender contagiar de esa preocupación materialista, individualista y banal a toda la sociedad.

La televisión merece un capítulo aparte. Los programas dedicados a los chismes o los denominados ‘magazines’ (programas en los que se habla de manera frugal de muchos temas) hablan del dólar contradiciendo el target al que apuntan desde la publicidad que pareciera mirar principalmente a las amas de casa –promocionando electrodomésticos, corpiños mágicos y créditos a sola firma- quienes difícilmente inviertan sus pesos cotidianos en dólares. Sin embargo abundan en la pantalla chica de cualquier programa economistas que recomiendan qué hacer y donde refugiarse frente al ‘horror’ de no poder comprar dólares…

Esta nota pretende ser un homenaje al 60% de los argentinos que jamás ahorrará en dólares, al 30% que jamás vio ni verá un dólar. A los millones que hay en cada uno de esos porcentajes que, además, se la rebuscan para ser felices, para trabajar, para salir de vacaciones por donde puedan: Mar del Plata, San Rafael, Bariloche… Y a los que están casi obligados a emborracharse con imágenes que le auguran “lo peor” si el dólar se ‘dispara’ y que tienen que comerse todo el día el bodrio del papel, el parlante y la pantalla que lo único que quieren es contagiarlos del ‘spam’ verde.