La Corriente Peronista Mendoza reunirá a sus principales espadas en un cónclave que se realizará el martes o miércoles de la semana que viene. La reforma política y la crisis financiera de la provincia y las comunas también serán tema de análisis.

El sector de Ciurca, Miranda y Abraham impulsará la empresa estatal de minería

Por UNO

Por Daniel Calivares

La Corriente Peronista Mendoza se volverá a reunir la semana que viene con dos objetivos en la mente. Por un lado, la reforma electoral, por otro, el proyecto de empresa de minería hecho por el senador Ignacio Ortigala y cuya intención es tratarlo una vez que se apruebe el estatuto de su similar de Energía.

Según explicó el intendente de Guaymallén, Alejandro Abraham, el cónclave será entre martes y miércoles a la noche, seguramente el segundo día, en un lugar a designar. Allí estarán todos los caciques del nuevo sector del justicialismo, más legisladores y se contará con la presencia del vicegobernador Carlos Ciurca. Asimismo, se espera la presencia de algunos gremialistas.

Entre todos escucharán a Ortigala, quien explicará de qué se trata su proyecto de crear una empresa minera estatal. De hecho, el mismo legislador ya explicó que cuenta con el apoyo del sector para impulsar el texto, una vez que la legislatura haya aprobado el estatuto de la empresa de Energía y el gobernador Francisco Pérez tenga decidido cómo conformará el directorio de esta.

Previo a Ortigala, el cónclave se centrará en un análisis de la situación financiera para el segundo semestre y en la reforma política y constitucional, todos temas que formaron parte de la reunión que tuvo Pérez con los intendentes del justicialismo, la semana pasada.

En lo que tiene que ver con la reforma, Abraham explicó que la idea es discutir sobre los puntos acordados previamente con el Ejecutivo, entre los que están los derechos de los pueblos originarios, el voto de los adolescentes de entre 16 y 18 años en elecciones municipales, la creación del defensor del pueblo, la autonomía municipal, autarquía judicial y la protección del medio ambiente y de los consumidores.

Si bien, estos puntos tienen un amplio acuerdo, hay otros que a algunos dirigentes les hacen ruido, como la revocatoria de mandatos, explicó Abraham, quien además, descartó que se vaya a tratar el tema de las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO).

“Ese tema está muy empantanado, no hay voluntad de ningún intendente para tratarlo”, señaló el cacique de Guaymallén, que agregó que “los partidos políticos no pueden perder la capacidad de elegir a sus propios candidatos”.

No obstante, los intendentes pueden llegar a avanzar en adoptar ciertas partes de las PASO, como la norma que impide que un dirigente que participó de unas internas y perdió, pueda ser candidato por otro partido.

También se puede llegar a estudiar el tema de las colectoras. “Hay que trabajar en eso para que no haya candidatos que tengan a cinco o seis gobernadores distintos”, reclamó uno de los fundadores de la Corriente Peronista Mendoza.

Por último, hay un punto que Abraham quiere agregar en la reforma y es que las empresas estatales tengan rango constitucional, “para que el Estado nunca pierda el control accionario y no vuelvan a privatizarse”.

Contra la oposición

Abraham también apuntó sus dardos hacia el pacto radical-demócrata, que buscan que la reforma constitucional se deje para el año que viene y pretenden que se avance primero sobre algunos proyectos como el desdoblamiento de elecciones y la implementación de la boleta única.

Sin embargo, para el justicialismo, debería ser al revés, primero la reforma y luego el desdoblamiento, por lo que el objetivo es, también, diseñar una estrategia legislativa.

“Vayamos de lo general a lo particular, ellos opinan como si hubieran ganado las elecciones”, explicó Abraham, quien se consoló al advertir que el frente opositor no está sólidamente consolidado luego de que los radicales Roberto Iglesias y Laura Montero y los demócratas Luis Rosales y Jorge Difonso mostraran su desacuerdo con lo pactado.